Un año de remontada en Cambre

Hace un año, el Concello de Cambre vivía un atasco inaudito y tenía vacante el sillón de Alcaldía. García Patiño se marchó, convencido de que el criterio y la «animadversión» hacia él de las habilitadas nacionales eran el problema. María Pan aceptó el reto, que se complicó al dejar el PSOE a UxC en minoría

La secretaria, la alcaldesa y la interventora, en un pleno.  | | IAGO LÓPEZ

La secretaria, la alcaldesa y la interventora, en un pleno. | | IAGO LÓPEZ

Cambre

Tras la marcha, el 7 de marzo, del que fuera alcalde desde 2015, Óscar García Patiño, meses después de denunciar que el Concello acumulaba cinco millones de euros en impagos, el día 23 tomó la vara de mando María Pan con una apuesta por el «diálogo» como clave para sacar al Concello del atolladero.

Pago de facturas.

Los pagos atrasados eran una de las tareas más acuciantes. En su año en la Alcaldía, Pan ha desbloqueado el pago de 4,25 millones de euros en facturas por servicios esenciales y casi medio millón a las concesionarias —en precario— del abastecimiento de agua y la limpieza viaria, Augaservi y Emprego Social, respectivamente. Estos abonos se tramitaron como reconocimientos extrajudiciales de crédito (REC), fórmula que ha recabado informes contrarios y reparos de Intervención y Secretaría. La oposición ha pedido dejar de recurrir a esta vía y agilizar las contrataciones. Los grupos, de hecho, han tumbado en tres ocasiones un expediente con facturas por 161.000 euros. El Gobierno local defiende los REC como la fórmula viable para pagar y evitar el enriquecimiento injusto y quedarse sin servicios. Por otro cauce, el decreto de Alcaldía, se han pagado otros 1,18 millones, precisa el Ejecutivo.

Salida del PSOE

El socio del Gobierno en el primer tramo del mandato, el PSOE, plantó a UxC tras el impasse. El voto en contra de los socialistas ha sido determinante, por ejemplo, en el triple rechazo al REC.

Cuestión de confianza.

Pan presentó una cuestión de confianza vinculada a los presupuestos de 2024. No hubo moción de censura. Las cuentas de 2025 están en negociacionen con los grupos.

Criterio de las funcionarias.

A los tres días de su investidura, Pan anunció que acababa de enviar al Consello Consultivo los dos primeros expedientes de revisión de oficio de contratos en precario: la limpieza de edificios municipales y la conservación, mantenimiento y mejora de las instalaciones de iluminación. Este paso siguió el criterio de la interventora y la secretaria municipales, pero políticos y funcionarias no se han acompasado del todo. Las habilitadas urgen a actualizar contratos y abogan por la revisión de oficio de concesiones caducadas, trámite que el Gobierno local ha seguido en algunos expedientes, mientras que en otros ha optado por abreviar y pagar a través de REC, solución que rechazan las funcionarias cuando faltan los trámites de contratación.

Juzgados.

La posible contratación reiterada de forma verbal y sin el procedimiento legal ha llevado a un segundo juzgado a citar al exalcalde como investigado por un posible delito de prevaricación, mientras otro le investiga por el pago de horas extra y el proceso de designación del exjefe de la Policía Local.

Avances en contratación.

El Concello arrastraba atasco en trámites de contratos y servicios básicos en precario, alguno desde hace 25 años. En este año, se han licitado el Servizo de Axuda no Fogar, el suministro de combustibles en edificios y coches municipales o el mantenimiento de marquesinas. Otros expedientes siguen en proceso y en alguno han tenido que actualizar los precios por la demora en tramitarse, explica el Ejecutivo.

Emergencia sanitaria.

El Ayuntamiento declaró en mayo la emergencia sanitaria por un «problema de salubridad» en colegios y el centro de salud, por problemas derivados de los impagos a la empresa que prestaba el servicio, en precario desde hacía 12 años. Una semana después contrató a Tragsa de urgencia mientras regulariza el contrato.

Escasez de personal.

Trabajadores del Concello han protestado en las últimas semanas por la «escasez extrema de personal» y por una RPT (Relación de Puestos de Trabajo) de 1999. El Gobierno local no obtuvo apoyos para el último cambio propuesto en la RPT y aseguró que no pudo llevar una nueva a votación por tener informes contrarios. La Policía Local acusa de forma visible esta falta de personal; la Guardia Civil ha asumido la vigilancia de vías municipales.

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