Saltar al contenido principalSaltar al pie de página

Un tribunal militar condena a un año de cárcel a la presidenta de la asociación Mirabal

Acusa a Ana Saavedra de denunciar en falso a un guardia civil

CUARTEL DE SANTO DOMINGO, SEDE DE LA DELEGACION DEL MINISTERIO DE DEFENSA, EN A CORUÑA.

CUARTEL DE SANTO DOMINGO, SEDE DE LA DELEGACION DEL MINISTERIO DE DEFENSA, EN A CORUÑA. / 13fotos

A. P. / J. M. G.

Betanzos

El Juzgado Militar Territorial número 41 de A Coruña ha condenado a un año de prisión a la presidenta de la asociación Mirabal de Betanzos, Ana Saavedra, por una «denuncia falsa» contra un teniente del cuartel de Betanzos. El juzgado condena también a la responsable de este colectivo contra la violencia de género a pagar una multa de 720 euros. El fallo no es firme.

Los hechos que han sentado a Ana Saavedra en el banquillo de un tribunal militar se remontan a septiembre de 2022. La acusada acompañó al cuartel de Betanzos a una mujer que había solicitado su asesoramiento en un caso de violencia de género para interponer la correspondiente denuncia.

Según recoge el fallo, Saavedra aprovecho para manifestar al sargento del puesto brigantino su indignación por el trato que, supuestamente, había recibido esta mujer en el cuartel de Sada donde, según su versión, el sargento se había negado a atenderla y le había reprochado que estuviese «borracha como un piojo».

El teniente de Betanzos le ofreció entonces la posibilidad de interponer una queja y unas semanas más tarde contactó de nuevo con ella para citarla en el cuartel, donde le presentó el escrito de queja ya redactado para que lo revisase y lo firmase si estaba de acuerdo.

El tribunal ve probado que Ana Saavedra firmó este escrito a pesar de que, horas más tarde, la presidenta de Mirabal se personó en la Comandancia de A Coruña para denunciar al teniente por un supuesto delito de falsificación de documento público y suplantación de identidad. Su denuncia dio pie a un procedimiento que fue archivado en julio de 2023, lo que dio pie a la apertura de una causa contra la presidenta de Mirabal por supuesta denuncia falsa.

Durante el juicio, Saavedra negó haber firmado la queja contra el sargento de Sada y alegó, entre otros extremos, que no había estado presente en la conversación entre este agente y su representada y que le correspondería en todo caso a esta interponer dicha reclamación. En la vista salió además a relucir un mensaje de Whatsapp que Saavedra había enviado a un capitán con el escrito de queja sin firma para informarle de que no había rubricado la queja.

El tribunal no estimó su alegato y ve probado que Saavedra estampó su firma en la queja y envió después una foto de la copia que le habían entregado para intentar probar lo contrario. Basan su dictamen en la conclusión de un perito del departamento de grafística del Servicio de Criminalística de la Policía Judicial de Madrid, que  atribuyó sin asomo de duda la firma a Ana Saavedra. El perito solicitado por la defensa coincidió en que se trataba de una rúbrica difícil de falsificar pero apeló a ciertas anomalías que le impedían «llegar con certeza a alguna conclusión acerca de la autoría».

La sala apela además al testimonio de un agente que entregó al teniente el libro de quejas sin firmar y que declaró que unos minutos después este abandonó el despacho «casi simultáneamente» que Ana Saavedra con los documentos firmados.

La condena no es firme y la presidenta de Mirabal, que se opuso sin éxito a ser juzgada por un tribunal militar, aún puede presentar recurso.

Tracking Pixel Contents