Desde el nacimiento de LA OPINIÓN A CORUÑA, en el año 2020, se han dictado en el partido judicial más de medio millón de sentencias. Las juezas y jueces que hemos trabajado en los órganos judiciales coruñeses a lo largo de estas dos décadas hemos dado respuesta a problemas reales que afectan a la ciudadanía, desde casos de violencia sobre la mujer o crímenes hasta procedimientos urbanísticos o familiares. Y, en los últimos meses, hemos tenido que pronunciarnos sobre las restricciones de derechos fundamentales derivadas de la crisis de la COVID-19. La Justicia ha estado presente, y lo seguirá estando, en prácticamente todos los ámbitos de nuestra sociedad, pues es imprescindible, al igual que lo son los medios de comunicación, para garantizar el Estado de derecho.

Ya advirtió Gandhi que el futuro “depende de lo que hacemos en el presente”. Por eso, antes de analizar cómo será la Justicia en los próximos 20 años, me gustaría recordar lo que, entre todos y todas, estamos logrando. Como miembros de la carrera judicial, hemos desarrollado nuestra labor profesional con el único objetivo de contribuir a hacer de A Coruña una ciudad más tolerante y justa. Un reto en el que continuaremos trabajando en el futuro.

El desarrollo de la urbe ha estado y estará ligado a la Justicia. La decisión de trasladar a finales del siglo XVI la Real Audiencia de Galicia a la ciudad fue esencial para su progreso. Ese órgano dio origen, primero, a la Audiencia Territorial de La Coruña y, más tarde, al Tribunal Superior de Xustiza de Galicia y, por tanto, a que A Coruña sea hoy el epicentro judicial gallego.

Desde entonces, la idiosincrasia de algunos de los barrios de la ciudad está marcada, sin duda, por la actividad judicial. En 1930 se inauguró el Palacio de Justicia en El Ensanche con la intención de revitalizar la zona. Hoy, la plaza de Galicia y sus alrededores constituyen uno de los principales centros de la vida comercial y empresarial de la ciudad.

Hace 30 años el barrio de Os Mallos también sufrió una gran transformación con la apertura, en 1991, del edificio de Nuevos Juzgados, al que más tarde se unió el antiguo edificio de la Audiencia Provincial. Y, por último, desde 2017, la nueva Audiencia Provincial contribuyó a la regeneración de la Fábrica de Tabacos y de todo su entorno.

Pero no solo debemos preparar el futuro con edificios y medios materiales. También debemos sentar las bases necesarias para que la organización judicial, su actuación y la importancia de la Justicia sean conocidas desde los primeros momentos de la formación de nuestro estudiantado. Por ello, hemos puesto en marcha el programa Educar en Xustiza. Su objetivo no es otro que lograr que el alumnado entienda que nuestro sistema judicial quiere contribuir a generar una sociedad con valores, una sociedad que defienda la igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres, la concordia, el respeto y la no discriminación entre individuos, la protección de la infancia y de nuestras personas mayores.

La Justicia del siglo XXI deberá crecer con la sociedad para responder a sus necesidades y afrontar los nuevos retos que vivirá A Coruña, tal y como ha hecho LA OPINIÓN en estos 20 años de vida que hoy celebramos. Le deseo a este medio que pueda cumplir otros tantos haciendo gala de calidad periodística y que la excelencia sea el camino que siga eligiendo.