Antes de comenzar la campaña de la anchoa en el Cantábrico las cofradías y las organizaciones de productores que participan en la costera se reunieron para fijar las reglas que rigen su actividad. En el encuentro establecieron cambios en los topes diarios de captura, así como en los horarios de descarga en puerto y venta en lonja.

Este año el cupo diario depende del tamaño del barco, según explica Eduardo Carreño. Las embarcaciones que superan la medida de 120 GT pueden capturar cada día 10.000 kilos de anchoa, mientras que los cerqueros más pequeños no podrán sobrepasar los 8.000 kilos diarios. Además, para garantizar un tamaño mínimo de las anchoas, en cada kilo deberá haber un máximo de 50 ejemplares.

Las embarcaciones no pueden faenar hasta las diez de la mañana y no pueden vender sus capturas después de las nueve de la noche.