La actividad del marisqueo a pie en Galicia, uno de los pocos sectores económicos con presencia mayoritaria de mujeres, presenta en los últimos 12 años una notoria tendencia a la baja. Desde 2001 el número de permisos se ha reducido casi un 40% en el conjunto de la comunidad, aunque con zonas de producción con un índice de caída superior al 50%. Es lo que reflejan los datos del Instituto Galego de Estatística (IGE) en su análisis de la evolución de los permisos de marisqueo a pie de 2001 y 2012.

El abandono de la actividad al alcanzar la jubilación las mariscadoras de más edad, sumado a un acceso más ralentizado de las generaciones jóvenes -pese a la gran demanda existente hace unos años- ante la menor rentabilidad del trabajo por los menores precios y la bajada de la demanda del mercado, especialmente desde que en 2008 se inició la actual crisis económica, los efectos del furtivismo incluso en el canal de comercialización o la afectación por la declaración de zonas C -contaminadas- parecen explicar la línea descendente que marcan las cifras oficiales, según se apunta desde el propio sector.

En datos concretos, al cierre del pasado año 2012 había en toda Galicia un total de 3.954 permisos de marisqueo a pie, frente a los más de 6.500 del año 2001. Por zonas, la que presenta una reducción más acusada es la de Pontevedra, donde el número de permisos de marisqueo a pie ha caído casi un 55% en los últimos doce años, al pasar de los 761 registrados en 2001 a los 353 con que se cerró el pasado año. También la zona de producción de A Mariña (Lugo), aunque con una actividad marisquera mucho menos intensa que las rías atlánticas, ha perdido más de un 53% de permisos en el mismo periodo, al igual que ocurre en la zona de Fisterra (-50,8%).

La zona de producción de A Coruña y Ferrol tampoco escapa a la tendencia a la baja y perdió un 49% de sus profesionales del marisqueo, al pasar de los 562 contabilizados en 2001 a los 288 que trabajaban en los arenales coruñeses al cierre del pasado ejercicio.

La actividad en Vigo, la segunda zona de las nueve de Galicia por número de permisos marisqueros tras la de Arousa, no ha sido ajena tampoco a la merma del número total de permisos de marisqueo, al dejarse desde 2001 un 49,6%. Pasó de más de un millar al inicio de la década pasada a 540 a finales de 2012.

La zona productiva de Arousa, por su parte, aunque triplica a la de Vigo en permisos, también sufrió descensos, aunque por debajo de la media. En 2012 mantenía activos casi 1.800 permisos, un 31,5% menos que los 2.621 de 2001.

Del análisis de los datos del IGE se desprende también que la bajada global de permisos en los últimos cuatro años (2009-2012) fue en Galicia del 7,64% y que se trata aún de una actividad abrumadoramente femenina, aunque con matices en el último cuatrienio. De los 3.954 mariscadores a pie autorizados a trabajar en 2012 en Galicia, solo 475 eran hombres. Sin embargo, si se analiza la evolución en los últimos cuatro años se extrae la conclusión de que el sector ha visto incrementada la presencia masculina en un 20,5% mientras que el número de mujeres ha sufrido una merma del 10,5%.

Esta situación podría explicarse, según la presidenta la Asociación Galega de Mariscadoras (Agamar), Natalia Laíño, en el hecho de que "tal vez, en los últimos años algunos hombres de otros sectores del mar han decidido entrar en este y como para el baremo de acceso al permiso se valoran la formación o la experiencia en el ámbito pesquero, logran más puntos que algunas mujeres".