El Gobierno gallego entiende que las cofradías y federaciones de la comunidad están llamadas a desempeñar un "papel colaborador" en las "decisiones importantes para el sector", como por ejemplo "los debates en los que se deciden las políticas pesqueras, autonómicas, nacionales o comunitarias". Pero esa colaboración debe plasmarse también -como recoge el decreto analizado ayer-, mediante "el cumplimiento de la normativa en materia de pesca, descarga, primera venta y comercialización".

Los pósitos, asimismo, "deben facilitar la labor de inspección", así como "responsabilizarse de la vigilancia de las zonas de dominio público marítimo y terrestre que le sean confiadas". Entre sus funciones están, asimismo, "concentrar la oferta, regularizar precios, establecer planes de producción y comercialización, aplicar la política pesquera comunitaria y favorecer la creación de empresas, asociaciones o cooperativas para alcanzar la eficacia y rentabilidad en los procesos de transformación y comercialización de los productos pesqueros".

Según explica la Xunta, el decreto permitirá a las cofradías trabajar como "entidades modernas, solventes y competitivas" en un mercado "en constante transformación"