Daños en embarcaciones y artes de pesca, gran mortandad de moluscos, ingresos casi inexistentes para los marineros... Es el balance de los daños causados por los continuos temporales que azotan el litoral gallego desde hace ya casi dos meses en los que la flota permanece amarrada a puerto sin poder salir a faenar en la gran mayoría de los días. Ante esta grave situación, la Federación Galega de Confrarías de Pescadores lanza una llamada de socorro a la Xunta, a la que exige medidas económicas "excepcionales y urgentes" para paliar los daños ocasionados por el mal tiempo. Las reclamaciones del sector -solicitadas ya por escrito a la Consellería do Mar- pasan por conseguir la exención de cuotas a la Seguridad Social en el primer cuatrimestre del año, ayudas para recuperar la capacidad productiva y fondos para compensar el cese de actividad de la flota. "Como no se haga algo al respecto vamos a perder puestos de trabajo", lamenta el presidente de los pósitos gallegos, Benito González.

Calcular las pérdidas económicas de la flota es casi misión imposible. "Es algo incalculable", señala González, que asegura que lo que dejó de ingresar el sector en las últimas semanas es "una cuantía muy elevada". Solo en lo que atañe a la flota que opera en A Coruña, la cofradía de la ciudad cifra en cerca de 200.000 euros las pérdidas acumuladas por los temporales. Otras fuentes del sector calculan que un barco de artes menores deja de ganar cada día entre 300 y 500 euros, mientras que en un arrastrero puede llegar a multiplicarse "hasta por treinta", y situarse así entre 9.000 y 10.000 euros por cada jornada de trabajo perdida.

La Federación reclama al Ejecutivo gallego que interceda y establezca medidas económicas "especiales" para los autónomos y trabajadores del mar que compensen el cese de actividad. La falta de ingresos provoca además que los marineros no puedan hacer frente a los pagos a la Seguridad Social, por lo que los pósitos exigen a la Consellería do Mar que medie ante el Instituto Social de la Marina para conseguir la "exención total" de las cuotas del primer trimestre del año, así como el "aplazamiento" y "pago fraccionado" de las deudas existentes del último trimestre sin recargos para la flota de bajura y el marisqueo. Las cofradías reclaman también medidas de exención y de pagos fraccionados en las tasas portuarias y otras aplicadas a la actividad pesquera y marisquera.

Entre las reivindicaciones del sector está además que la Consellería haga gestiones ante el Igape (Instituto Galego de Promoción Económica) y el ICO (Instituto de Crédito Oficial) y otras entidades financieras para abrir líneas de financiación con intereses al 0% destinadas a recuperar la capacidad productiva (compra de aparatos, reparación de daños en embarcaciones, artes de pesca...), así como fondos para regenerar los bancos marisqueros tras la "gran mortandad" de moluscos causada por el exceso de agua dulce.

Las cofradías ya remitieron sus reclamaciones a la Consellería do Mar, de la que esperan que "estudie y valore todas las posibilidades". "El sector está atravesando una situación muy grave y no queremos que se pierdan puestos de trabajos, queremos que se genere empleo", señala González.

Ante estas reivindicaciones, la Consellería asegura que ya mantiene "contactos" con el Gobierno central para "ver qué posibles líneas de trabajo" se pueden acometer, aunque fuentes de Mar indican que habrá que esperar a que los temporales remitan por completo. El Ministerio de Interior, por su parte, precisó ayer que "no está descartado" dar ayudas al sector. "Una vez que se pueda se hará una valoración", sentencia.