Los armadores de cerco han hecho las paces con la conselleira do Mar, Rosa Quintana, después de que esta se disculpase con ellos por si hizo algún comentario desafortunado sobre las protestas protagonizadas por el sector en las últimas semanas para exigir un nuevo reparto de las cuotas de jurel y xarda -o caballa-. La asamblea de armadores decidió retomar el diálogo con la titular de Mar, eso sí, con un objetivo claro: la flota asegura que ya no tiene nada que negociar con Quintana y lo único que le reclama ahora es que intermedie para conseguir una reunión en Madrid entre los representantes del cerco y el Ministerio de Agricultura para renegociar el reparto de cuotas. A la espera de lo que ocurra en el encuentro convocado para hoy entre Quintana y el sector, una delegación del cerco viaja a Madrid para trasladar sus demandas al Congreso.

"El problema que tenemos no es aquí, es en Madrid y lo único que queremos de la conselleira es que nos lleve a Madrid, nada más", señalaba ayer uno de los armadores, para añadir que lo que exigen ahora a Quintana es que "busque vías, porque esto ya no tiene marcha atrás". Pero está por ver cómo responde la titular de Mar, con la que se reúnen hoy los armadores, y que ayer reiteró que el reparto de cuotas fue cerrado el 20 de diciembre en Madrid y que lo que tienen que hacer ahora los pescadores es decidir "el mejor modelo de gestión con la cuota que le corresponde a Galicia".

Quintana advirtió, además, de que si se aplicase al jurel el criterio de reparto de cuota por número de tripulantes -como reclama la mayoría del cerco gallego-, Galicia perdería 2.000 toneladas de este recurso. "Sabemos que en jurel vamos a perder unos 700 kilos por tripulante", contestaron los armadores, para añadir que el recorte se vería compensado con el incremento de los cupos de caballa. El sector añadió, además, que si el Ministerio de Agricultura no rectifica el borrador del reparto -al que presentarán alegaciones-, recurrirán la orden ante la Justicia.

A la espera de saber cómo reaccionará Quintana a la solicitud de una reunión con el Ministerio de Agricultura, cinco representantes del cerco viajan hoy a Madrid para trasladar sus demandas al Congreso. La invitación, según explica el sector, partió del PSOE, aunque también UPyD está interesado en recibirles y escuchar sus reivindicaciones. Los armadores cuentan además con que a su paso por la Cámara Baja les reciban también representantes del PP y del BNG.

Y es que todos los partidos políticos parecen mostrar ahora interés por el problema del cerco, después de la batalla campal con la que finalizó la protesta de los armadores el pasado martes en Santiago. Tras conocer el aumento de cuotas de xarda para el cerco gallego -1.450 toneladas adicionales- tras un pacto entre la CE, Noruega y Feroe, todos los partidos salieron ayer a defender al sector.

El PSOE explicó que el aumento de cuota no resuelve el conflicto del cerco, ya que se mantiene el mismo reparto, mientras que AGE acusó a la Xunta de "jugar" con la flota y el BNG critica que se trata de un "nuevo engaño" con el que Galicia es la más perjudicada.

El ministro de Agricultura, Miguel Arias Cañete, por su parte, aseguró que no existen razones "estrictamente pesqueras" para seguir adelante con las protestas, una opinión que comparte el secretario general de Pesca, Carlos Domínguez.

Por su parte, el armador coruñés Manuel Iglesias, que comenzó una huelga de hambre el pasado lunes, puso ayer fin a su protesta "por motivos de salud". "Por la tarde me dio un vahído y preferí no seguir delante porque la cosa puede ir a peor", explicó ayer ya desde su casa. Aún así, Iglesias asegura que apoyará al cerco y hará "todo lo que haga falta" para conseguir el aumento de cuotas que busca el sector.