Las tragedias ocurridas en las últimas semanas en el mar han dejado de luto al sector, consciente del alto peligro que conlleva la actividad pesquera. Y es que según la Organización Internacional del Trabajo (OIT), la pesca es la profesión de mayor riesgo a nivel mundial. Es por ello que la flota española está preparada para afrontar cualquier problema en el mar, con equipos de seguridad a bordo. ¿Pero estos sistemas cumplen con la normativa española? Lo cierto es que sí, o por lo menos en su mayoría. Es más, según los últimos datos del Gobierno las deficiencias de seguridad en los pesqueros españoles se han reducido en los últimos siete años, al pasar del 25,38% registrado en 2007 al 11,06% del pasado año, lo que indica que la seguridad "importa al sector".

El Plan Segumar, dedicado a la inspección de la seguridad en los buques, está dando resultados. Así lo recoge el último número de la revista Mar que publica la Seguridad Social, en el que se recoge que las infracciones a la baja en esta materia alcanzaron en 2013 un récord histórico. La Comisión de Trabajo encargada de los controles -en la que participan, entre otros, la Secretaría General de Pesca, la Sociedad de Salvamento y Seguridad Marítima y el Instituto Social de la Marina- realizó el pasado año 224 inspecciones, en las que detectaron deficiencias en un 11% de los casos, el dato más bajo desde que se puso en marcha el Plan Segumar, en el año 2007.

Según los datos del Gobierno, el mayor número de infracciones (12,67%) se encontraron en los pesqueros de entre 16 y 20 metros de eslora. En cuanto a la antigüedad de las embarcaciones, el mayor número de deficiencias se hallaron en los barcos construidos en los años 50 (12,45% del total). Las inspecciones del pasado ejercicio se realizaron en todo tipo de pesqueros, si bien destacaron los arrastreros y las embarcaciones de menos de 50 TRB, que fueron las más inspeccionadas.

Entre los fallos detectados el pasado año en los buques, el Plan Segumar detectó errores en lo referido a la participación de los marineros en acciones preventivas, así como deficiencias en la existencia y el mantenimiento de los elementos de salvamento a bordo.

Por puertos, el mayor número de acciones inspectoras del pasado ejercicio se llevaron a cabo en las dársenas de las provincias de Cádiz, Málaga, Tarragona y Barcelona, mientras que las que registraron menos inspecciones fueron Las Palmas, Tenerife, Huelva, Ceuta Cantabria y Vizcaya,

Y aunque la publicación de la Seguridad Social no recoge datos de Galicia, según los últimos informes a los que tuvo acceso este diario (hasta 2012), en el puerto de A Coruña las deficiencias pasaron del 20,12% registrado en 2007 al 10,72% de hace dos años. En Lugo, por su parte, cayeron del 26,08% al 6,63% en el mismo periodo de tiempo, mientras que en el puerto de Vigo pasaron del 12,41% al 8,48%. Por último, en Vilagarcía las inspecciones empezaron más tarde, en 2012. Desde ese año, las deficiencias pasaron del 13,14% al 8.48% registrado en 2012.