Los exmarinos gallegos de la asociación Long Hope critican que el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, no se reúna con ellos para tratar de resolver el problema de sus pensiones, que Noruega se niega a abonarles. Los representantes de los afectados mantuvieron ayer un encuentro en Santiago con la directora general de relaciones institucionales y parlamentarias del Gobierno gallego, Blanca García-Señoráns, que prometió trasladar el problema a sus superiores con el objetivo de encontrar una solución. "Fue muy cordial y amable, pero desconocía totalmente el problema", criticó el portavoz de Long Hope, Alberto Paz. "La Xunta lleva ocho años tratándonos como a piojosos. No entiendo por qué compatriotas que estuvieron en otros países sí tienen pensiones y nosotros no", sentenció.

La asociación tiene previsto realizar una nueva protesta en Santiago el próximo 20 de abril.