La firma internacional Sustainable Fisheries Partnership reunió recientemente en un congreso en Galicia a 65 profesionales de la pesca de 18 países diferentes. Esta organización se preocupa de detectar problemas pesqueros a lo largo de todo el mundo y de involucrar a toda la cadena productiva en su solución. Pedro Ferreiro, licenciado en Biología, lidera como director adjunto la división de compradores de la compañía. Él es el responsable de que el encuentro se celebrase en Galicia y una voz autorizada para hablar de la situación de la pesca internacional por sus más de diez años de experiencia en instituciones y firmas nacionales y extranjeras.

-¿De qué temas se ocupa la organización para la que trabaja?

-Trabajamos con los departamentos de responsabilidad corporativa de empresas de distribución, sobre todo con supermercados y con sus proveedores de pescado. El objetivo es involucrarlos en promocionar mejoras en las pesquerías con las que trabajan.

-¿Qué pretenden conseguir mediante estas mejoras?

-Queremos garantizar la sostenibilidad de los recursos pesqueros, el medioambiente y la disponibilidad de alimentos de origen marino en un futuro. Con la ayuda de nuestro trabajo, las empresas de distribución identifican los problemas de las pesquerías. A partir de su influencia dentro de la cadena de suministro, junto con la de los demás eslabones intermedios, vemos cómo podemos cambiar la situación de las empresas pesqueras. Colaboramos con Gobiernos de todo el mundo y también con ONG para buscar soluciones.

-¿Cuáles son los problemas que detectan en el trabajo de las empresas pesqueras?

-El primero de ellos es el que afecta a la gestión pesquera. En algunos países de África, donde no existen recursos destinados a este fin, no saben cuánto pescado pueden extraer, cuál es la cantidad recomendada o desconocen el estado actual de la explotación pesquera de la zona. Otro de los inconvenientes con los que nos encontramos es el impacto ambiental de la pesca en algunas zonas concretas.

-¿Qué espacios marítimos están más amenazados en estos momentos?

-Probablemente, las zonas donde hay menos controles. Las pesquerías de la costa oeste africana y del sudeste asiático son las que más problemas tendrán en un futuro. La explotación de estos lugares está ligada al bajo desarrollo económico de sus países.

-En Galicia, ¿qué inconvenientes detecta su organización?

-Galicia es ejemplar en cuanto a pesca artesanal, no hay grandes problemas. Nosotros intentamos difundir el uso de estas técnicas en países subdesarrollados. El propósito es que sus gobiernos tengan una idea sobre cómo los gallegos usan este tipo de pesca para que puedan adoptarlas allí.

-¿Cómo es el proceso para solucionar estos desafíos?

-Una vez que hacemos el análisis, reunimos a todas las partes implicadas y les explicamos los problemas que hay y las posibles soluciones. Es una parte donde trabajamos mucho con los Gobiernos de países subdesarrollados para que avancen en la gestión de las carencias que detectamos.