El Gobierno abrió un expediente sancionador a nueve personas y tres entidades, todas de nacionalidad española, para determinar cuáles fueron sus responsabilidades y participación en la propiedad, gestión y explotación de dos buques pesqueros vinculados a armadores gallegos y a la pesca ilegal. Según informó el Ministerio de Pesca ayer, se trata de los barcos Thunder y Tchaw, que varios organismos internacionales identificaron como implicados en pesca ilegal, no declarada y no reglamentada (pesca Indnr, por sus siglas en inglés) e investigados en el marco de la operación Sparrow 2.

La Secretaría General de Pesca inspeccionó las sedes de varias empresas en las provincias de A Coruña, Pontevedra y Ourense los días 28, 29 y 30 de julio de 2015. Las actuaciones del servicio de control derivaron en la obtención de numerosa documentación sobre los buques Viking y Seabull 22 (ambos fuera de servicio y sancionados) y Thunder y Tchaw, sobre los que Pesca investiga ahora su implicación en actividades ilícitas. La legislación española tipifica estas prácticas como infracciones "muy graves" que pueden sancionarse con multas de entre 60.001 y 600.000 euros, además de exponer a las personas y empresas implicadas a la inhabilitación y a la prohibición de obtener ayudas públicas.

Los buques Thunder y Tchaw están incluidos en la lista de implicados en la pesca Indnr desde el 2010, aunque tres años antes la Organización Pesquera para el Atlántico Sureste (Seafo, por sus siglas en inglés) los identificó por desarrollar prácticas ilícitas. La Comisión para la Conservación de los Recursos Vivos Marines Antárticos (Ccrvma o Ccamlr, en inglés) incluyó en 2005 al Tchaw en su lista negra y un año después, en 2006, hizo lo mismo con el Thunder.

El Gobierno destacó ayer la importancia de los números IMO (de la Organización Marítima Internacional) que permiten identificar las embarcaciones y hacer un seguimiento de sus actividades y los productos que capturan. Para dificultar este rastreo, los buques piratas operaron bajo diferentes nombres. Así, el Tchaw navegó como Rex, Condor, Inca, Cisne Azul, Pescamex IV, Pescamex III, Arosa Cuarto y Pescacisne.

El barco furtivo Thunder se hundió a principios de abril de 2015 frente a las costas de Santo Tomé tras 110 días de persecución y los 40 marineros que iban a bordo fueron rescatados por la organización ecologista Sea Sheperd. El juicio para determinar la intencionalidad en el naufragio del barco se saldó con una multa de 15 millones de euros y penas de entre 32 y 36 meses de cárcel para el jefe de máquinas (natural de Muros), el segundo oficial de máquinas (de Ribeira) y el capitán, de origen chileno, ya que los jueces de Santo Tomé los consideraron culpables de dañar el medio ambiente, imprudencia, falsificación y contaminación. Antes de denominarse Thunder, este buque fue conocido como Batu I, Raz, Ming No. 5, Wuhan No 4, Kuko, Typhoon, Range, Rubin, Artic Ranger y Vesturvon.

Otras sanciones

La operación Sparrow 2 es una continuación de la Sparrow y ya derivó en la sanción de 2,45 millones de euros a seis firmas de Ribeira y Vigo y de 2,88 millones a seis personas encargadas de estas empresas supuestamente propietarias de los buques furtivos Viking y Seabull 22. En marzo del año pasado, el Gobierno multó con 17,8 millones de euros en el marco de la operación Sparrow a nueve compañías y siete personas por su vínculo con barcos que capturaban especies protegidas en el océano Antártico.