Agentes de la Policía Autonómica Galega identificaron durante la madrugada de ayer a 18 furtivos que extraían almeja sin permiso en Rianxo. Los miembros del Equipo de Respuesta Policial (Erpol) localizaron a los mariscadores ilegales durante un operativo que desarrollaron en el municipio coruñés durante la noche del 9 al 10 de agosto y procedieron a su identificación.

Los furtivos carecían de las licencias necesarias para poder extraer el molusco, por lo que los agentes tramitaron 16 actas de infracción y se incautaron de 100 kilos de almeja que los mariscadores ilegales habían recogido. Además, la Policía requisó los aparejos -rastrillos y azadas- que los individuos usaban para desarrollar la actividad. Según informó la Xunta ayer, el molusco decomisado se sembró de nuevo en el lugar del que había sido extraído.

Los agentes autonómicos ya detuvieron a 17 furtivos -16 de ellos por un delito contra la flora y la fauna, y uno por una infracción de receptación contra la salud pública y el medio ambiente- en el marco de la operación Entrerrúas, que se desarrolló en Cabo de Cruz, según informó la Xunta a principios de mes. En esa ocasión, la labor de la Policía también permitió localizar una depuradora situada en un domicilio particular que los mariscadores usaban para poder comercializar los productos que extraían de forma ilegal. El furtivismo está ahora tipificado como delito y no como falta tras una reforma del Código Penal que se produjo en 2015.