Las descargas en Galicia se redujeron un 26,5% hasta las 249,7 toneladas, frente a las casi 340 del primer mes de la campaña de 2016-2017 (que comenzó el 4 de julio de 2016). Las lonjas gallegas ingresaron casi 2 millones de euros, un 3,5% menos que durante julio del año pasado (2,07 millones), pero comercializaron el pulpo un 31% más caro, a una media de 8,01 euros por kilo frente a los 6,10 euros del mismo mes de 2016, según los datos provisionales de la Plataforma Tecnolóxica da Pesca, dependiente de la Consellería do Mar.

"Es una mala campaña, lo único positivo es el precio", resume el presidente de la Asociación de Armadores de Artes Menores de Galicia (Asoar-Armega), José Luis Rodríguez, que indica que los precios van desde los 6 euros por kilo del producto que pesa entre uno y un kilo y medio y los 11 euros del que supera los dos kilos. El representante de la flota artesanal asegura que la veda de un mes y medio no es rentable y que ésta debería prolongarse hasta los tres meses para permitir a la especie un mejor desove que garantice la temporada.

El periodo autorizado para capturar pulpo de la campaña 2017-2018 comenzó el 3 julio tras mes y medio de veda (iniciada el 19 de mayo) y hasta el 31, la lonja de A Coruña redujo un 37% las descargas, al comercializar 15 toneladas frente a las más de 24 que vendió en julio del año pasado. La escasez de las capturas provocó un incremento del precio medio del cefalópodo, que alcanzó los 6,88 euros por kilo, un 23% más que en el mismo mes de 2016 (5,56 euros) y reportó unos ingresos de 103.858 euros al centro de primera venta coruñés. El año pasado, la facturación fue de 135.299 euros (un 23% más).

La lonja de Ribeira, líder en desembarcos de este cefalópodo en Galicia, experimentó un mal arranque con un descenso del 22% en las subastas, con 57,7 toneladas el mes pasado. El centro de primera venta de la localidad coruñesa, sin embargo, ingresó 448.604 euros, un 2% más que en julio de 2016 (439.083 euros) debido a que el pulpo se vendió una media de 7,78 euros por kilo, un 31% más caro que el año pasado, cuando el precio medio fue de 5,94 euros.

Las lonjas de Bueu y Vigo, que están junto con Ribeira y A Coruña entre las cuatro más importantes de la comunidad, también experimentaron un descenso en la cantidad de producto comercializado ya que, según el presidente de Asoar-Armega, el recurso está mermado "en general" en toda Galicia. En Bueu, se subastaron 37 toneladas por 326.482 euros en el primer mes de la temporada frente a las 46 del año pasado por 295.171 euros y el precio medio se incrementó más del 37% (8,81 euros por kilo este año frente a los 6,42 euros de 2016). Vigo fue la lonja con el segundo precio medio más elevado de la comunidad -tras Cangas- al vender el pulpo a 9,01 euros por kilo de media (el año pasado, lo comercializó a 6,59 euros, un 36,7% más barato) y redujo la cantidad subastada un 28%, hasta las 32,5 toneladas (en julio de 2016 superó las 45). Los ingresos del centro de primera venta vigués son similares a los del año pasado, precisamente gracias al aumento de los precios: 292.962 euros este año frente a los 298.200 de 2016.

Los datos del inicio del periodo autorizado para capturar la especie contrastan con los de la totalidad de 2016-2017, que dejó un incremento del 38% en descargas hasta las 2.993 toneladas y del 41% en ingresos, hasta los 18,89 millones de euros, en las lonjas de Galicia. Rodríguez indica sin embargo que las últimas campañas no son buenas en comparación con las anteriores a 2010 y 2011, aunque "no todos los años son iguales".