La asamblea de trabajadores de la conservera Calvo en Esteiro rechazó el lunes el cierre de la fábrica situada en Muros y aprobó por "unanimidad" hacer "todo lo necesario" para evitarlo. El responsable de empleo de CCOO, Francisco Vilar, aseguró que no existe una causa económica que justifique la decisión de la empresa con sede en Carballo e hizo un llamamiento a los ayuntamientos limítrofes de los que proviene la mayor parte de la mano de obra -fundamentalmente femenina- para hacer un "frente social". Según Vilar, es "complicado" que los empleados puedan desplazarse hasta la sede debido a las cargas familiares y a la distancia.

La compañía anunció el 28 de septiembre que trasladaba la producción y la plantilla de su fábrica de Esteiro, donde solo se realizaba la limpieza de pescado, a Carballo. Calvo alegó que había "mermado" su capacidad de producción y Vilar acusó a la firma de provocar esta situación, ya que "el mayor coste" en la transformación está en la limpieza y en Esteiro "no se vendían" las latas.