Hay infinidad de algas susceptibles de ser explotadas en Galicia. La extracción de unas u otras depende de los intereses de cada cofradía o empresa transformadora y comercializadora.

Entre las especies de algas a extraer están el laver ( Porphyra umbilicalis), comestible y con un alto contenido en sales minerales, especialmente yodo y hierro; la lechuga de mar ( Ulva), conocida comúnmente como lamilla; la Undaria pinnatifida, a la que vulgarmente se llama wakame y que es muy demandada en Japón, donde se emplea para hacer sopa; el argazo bravo o golfo ( Saccorhiza polyschides), un alga parda muy común en la costa atlántica que puede alcanzar los 2,5 metros; y la Himanthalia elongata, conocida como correa, judía o espagueti de mar, una macroalga atlántica muy presente en la costa gallega. Además hay Laminaria, un género de algas pardas caracterizado por sus largas y correosas láminas; la Mastocarpus stellatus, también llamada jadeo de gato o falso musgo de Irlanda; el alga roja Chondrus crispus (musgo de Irlanda); y otra alga roja como la G igartina sp.