Las organizaciones pesqueras gallegas urgen soluciones para el problema al que se enfrenta la flota a la hora de encontrar personal cualificado para embarcar y evitar la paralización de las firmas por falta de tripulación. Las asociaciones de armadores, reunidas la semana pasada en el XIX Encontro Empresarial de Organizacións Pesqueiras en Burela (Lugo), reclaman a la Administración que flexibilice el real decreto de contratación de extranjeros o que incluya la pesca en el catálogo de ocupaciones de difícil cobertura para afrontar la escasez de trabajadores, que se traslada ahora de unas flotas a otras.

"Pedimos que se faciliten los procesos de contratación. Hasta 2011 estuvo abierta la posibilidad de contratar a extranjeros, pero con la crisis se cerró para que se contratase a gente nacional", explica el gerente de la Organización de Productores Pesqueros de Lugo (OPP-Lugo) -una de las entidades presentes en el encuentro-, Sergio López. Los empresarios piden, entre otros asuntos, unificar el nivel de las titulaciones y tripulaciones mínimas entre los países de la Unión Europea (las escuelas náuticas tienen alta ocupación pero "no se cubren las plazas necesarias") y la homologación de la experiencia.

López asegura que el Servicio Público de Empleo "no es válido" e indica que en el último año solo el 2% de los puestos de trabajo en Galicia se ocuparon gracias a este organismo, aunque en la pesca el porcentaje fue "mucho menor". "El sistema no es efectivo porque los trabajadores se anotan para ir al mar sin considerar si tienen los cursos necesarios. Hubo casos de organizaciones que tuvieron que hacer hasta tres procesos de selección para encontrar un candidato que cumpliese con las condiciones establecidas", lamenta el gerente de la OPP-Lugo. Según López, el número de personas inscritas en el paro para entrar a trabajar en el sector pesquero "no es real", ya que muchas no tienen los documentos en regla para poder incorporarse cuando es necesario.

La inclusión de la pesca en el catálogo de ocupaciones de difícil cobertura -en el que el 90% de las profesiones de Galicia recogidas están vinculadas al mar-, según algunos de los sindicatos, no es posible mientras haya demandantes de empleo, pero los armadores lamentan que estos no cumplen con los requisitos para formar parte de sus tripulaciones.

El gerente de la organización lucense indica que existe la "sensación" de que la pesca está mal pagada y aclara que, si bien es un oficio "duro" en el que puede haber problemas de conciliación, "no es un problema económico". "Gran parte de los chavales que salen de las escuelas y van para empresas de tierra a hacer labores de mantenimiento cobran tres o cuatro veces menos que embarcados", insiste el portavoz de la OPP-Lugo.

"La falta de gente se podría solucionar flexibilizando la contratación de extranjeros y si el que se apunta en los códigos del paro cumpliese los requisitos y condiciones para ese trabajo", concluye López, que insiste en que los mecanismos de la Administración para la contratación "no funcionan". El representante de la OPP-Lugo lamenta además las dificultades para encontrar el personal que se requiere pese a que las empresas están "dispuestas a pagar" y la gente, "a trabajar".