El Servizo de Gardacostas de Galicia asestó un nuevo golpe al furtivismo en aguas gallegas con el decomiso en los últimos días de cerca de 10.000 metros de redes de enmalle y 119 artes de pesca en numerosos controles realizados en las costas de la comunidad. Pero los agentes del organismo dependiente de la Consellería do Mar también decomisaron alrededor de 235 kilos de pescado y marisco obtenido de manera ilegal.
La ría de Arousa fue la zona con mayor actividad de los guardacostas gallegos, donde realizaron más registros y se incautaron de más material. Según los datos proporcionados por la Xunta, en la ría arousana decomisaron un total de 4,75 kilómetros de redes -de los cuales 4,5 kilómetros se incautaron en Corrubedo-, a los que se sumaron 54 aparejos de pesca y 111 kilos de pescado.
Las rías de Vigo, Muros y Noia, A Coruña, y la Costa da Morte también contaron con dispositivos de Gardacostas, con la incautación en aguas viguesas de 100 metros de trasmallos y un kilo de sepia. Mientras, en aguas de A Costa da Morte decomisaron 800 metros de redes, 15 kilos de pescado y 13 aparejos de pesca. En la costa coruñesa, por su parte, destacan los decomisos en la zona de Santa Cruz, donde la Xunta requisó 16 nasas, siete kilos de nécora y ocho de centollo -de un total de 33 kilos de productos del mar-. Los controles de los guardacostas en la ría de Muros y Noia se saldaron con la retirada de 35 útiles pesqueros, 3,85 kilómetros de redes y 74 kilos de pescado y marisco.
Con estos controles el Servizo de Gardacostas aspira a reducir la actividad irregular en el mar y evitar la llegada a los mercados de producto obtenido irregularmente.
