La sardina alcanza tradicionalmente buenos precios en lonja en los días que preceden a la celebración del San Juan, pero el balance de este año fue de los peores. La semana previa a la noche de las hogueras -del 17 al 23 de junio- se descargaron en las lonjas gallegas 285.692 kilos de recurso y la facturación alcanzó los 682.933 euros. Los datos de capturas son un 13,33% superiores a los de 2017 en esa misma semana -cuando los puertos gallegos recibieron 252.082 kilos-, pero los ingresos por este pescado cayeron un 12,62% pues el pasado año se facturaron 781.599 euros en las subastas. El precio medio de la sardina fue de 2,39 euros el kilo en el presente ejercicio, un 23% inferior al de 2017, en el que el producto se vendió a 3,1 euros. Lo más llamativo del dato es que es el segundo más bajo en ocho años pese a la escasez de capturas de la especie.
La cantidad de sardina pescada en vísperas de San Juan es la segunda más alta de los últimos cinco años, solo superada por la de 2016, pero las descargas son menos de la mitad de las registradas en 2010 (626.000 kilos) o 2009 (619.367). En 2016 las lonjas gallegas subastaron 303.942 kilos, un 6% más que en el mismo periodo de este año -en la semana anterior a la festividad-, pero el precio medio fue levemente inferior, de 2,23 euros el kilo, según los datos recopilados por la Plataforma Tecnolóxica da Pesca, dependiente de la Consellería do Mar.
Los precios que alcanzó la sardina en las jornadas previas al San Juan dejaron al sector con un sabor agridulce. A lo largo de esa semana el pescado llegó a los 2,39 euros el kilo, un valor un 61% inferior a los 6,18 euros de media que marcó el kilo de la especie en la misma semana de 2013, la máxima cotización en la última década y pese a que las subastas (211 toneladas de sardina) no fueron muy inferiores a las 285 toneladas de ese año. Desde ese ejercicio cotización media de este recurso en la semana previa al San Juan cayó progresivamente hasta el año 2016, cuando llegó al mínimo de 2,23 euros. El año siguiente el valor medio se recuperó (hasta los 3,1 euros el kilo), pero este año volvió a caer hasta los 2,39 euros de media.
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La situación que vivió la flota cerquera gallega durante la semana del 17 al 23 de junio fue negativa. Las condiciones meteorológicas y marítimas provocaron que las capturas de las embarcaciones fueran escasas pues el viento dificultó el trabajo de los marineros. El sector esperaba que ante la falta de sardina los precios se multiplicasen conforme se acercaba la noche meiga, pero su repunte fue inferior al previsto. El viernes 22 el precio medio de la especie alcanzó los 6,6 euros el kilo. Ese día los barcos desembarcaron 39.291 kilos de recurso que se subastó en las lonjas gallegas por un total de 260.569 euros. Este año, al coincidir la noche de San Juan en sábado, la comercialización de este pescado azul fue diferente. Aun así, los centros de primera venta de la comunidad subastaron el sábado unos 4.500 kilos de sardina que supusieron unos 28.504 euros de ingresos, lo que equivale a una media de 6,4 euros el kilo.
Aunque el precio de la especie no fue muy elevado respecto a ejercicios anteriores, durante la semana del 17 al 23 de junio hubo picos de precios elevados en algunas lonjas gallegas. En Cambados el precio máximo que alcanzó el kilo de sardina fue de 14,6 euros, mientras que en el puerto de A Coruña el mejor kilo de este recurso rozó los 13 euros. Mientras, en Portonovo marcó los 11,75 euros.
La dársena que más sardina recibió de toda Galicia en los días previos a San Juan fue la coruñesa, con más de 139.000 kilos desembarcados, casi la mitad de la totalidad de especie descargada en la comunidad. La facturación por la venta de este recurso ascendió a 323.183 euros, a un precio medio de 2,32 euros el kilo. El segundo puerto con más ventas de este pescado azul fue el de Vigo, con 37.316 kilos y una facturación de 80.893 euros, a una media de 2,17 euros el kilo. En tercer lugar aparece Portosín, con 32.656 kilos sacados al mercado a una media de 2,57 euros el kilo.
Los precios de la sardina también fueron inferiores a los de años anteriores en las plazas y mercados coruñeses en la semana previa al San Juan pese a su escasez. Su precio rondó los 6 euros el kilo.
