El tercer mes de campaña del pulpo deja una facturación acumulada en las lonjas de Galicia de 6,3 millones de euros, un aumento del 68,5% con respecto al mismo periodo del pasado año (3,7 millones de euros). Los ingresos de los centros de primera venta de la comunidad responden a la alta demanda que tiene este recurso, que no se cubre con la oferta de la especie. Los puertos gallegos descargaron entre el inicio de la campaña - que se produjo el 2 de julio- hasta el 4 de octubre 614,1 toneladas de pulpo, un crecimiento del 33% en comparación a las cifras de 2017 (461,5 toneladas), según los datos provisionales publicados por la Plataforma Tecnolóxica da Pesca, dependiente de la Consellería do Mar.

El precio medio en lonja sigue elevado y alcanza los 10,33 euros el kilo, mientras que durante el pasado ejercicio el kilo rondaba los 8,16 euros. "Durante este último mes el precio de venta bajó ligeramente [a principios de septiembre el kilo se pagaba a 10,5 euros]. La demanda se mantiene a pesar de los elevados precios", indica el presidente de la Asociación de Armadores de Artes Menores de Galicia (Asoar-Armega), José Luis Rodríguez.

El dirigente de la flota de artes menores constata un aumento en las capturas, pero ligero. "Es cierto que pescamos algo más de pulpo, pero no es para tirar cohetes. Estamos lejos de cubrir el cupo diario -50 kilos por tripulante y otros 50 por embarcación-", señala Rodríguez. Su caso refleja esa afirmación. Entre él, sus dos compañeros y su barco dispone de 200 kilos de cuota, sin embargo el día que más recurso capturó fue el jueves con 100 kilos: "Apenas conseguimos pescar el 50% del cupo", lamenta.

El representante de la flota artesanal gallega califica la campaña del cefalópodo de "precaria y pobre en cuanto a capturas", por lo que espera que la situación mejor en lo que resta de temporada. "Los meses de octubre, noviembre y diciembre suele haber más cantidad, pero de momento no vemos que en el mar haya más pulpo. A ver cómo evoluciona la situación", apunta Rodríguez. El presidente de Asoar-Armega asegura que gracias al elevado precio de la especie muchos compañeros pueden seguir dedicándose al pulpo.

La lonja de A Coruña recibió más cefalópodo en estos tres meses que en el mismo periodo del año anterior: 70,7 toneladas por las 53,2 del pasado ejercicio (aumentó un 32,7%). La facturación creció casi un 83% en el primer trimestre en el centro coruñés, ya que ingresó 696.624 euros por los 380.922 del 2017.