Varios grupos políticos de la Eurocámara -liberales, la Izquierda Unitaria Europea y los Verdes- expresaron ayer "dudas" sobre la conformidad jurídica del nuevo acuerdo de pesca entre la Unión Europea y Marruecos, ya que se incluyen en el pacto las aguas adyacentes al Sáhara Occidental.

La eurodiputada gallega de la Izquierda Unitaria, Lidia Senra, denunció presiones "muy fuertes" de Marruecos para que la Eurocámara respalde el acuerdo, pero insistió en que las aguas del Sáhara Occidental "no le pertenecen". La eurodiputada del BNG Ana Miranda, del grupo de los Verdes/Alianza Libre Europea, denunció que el pacto es "una prueba de cinismo e hipocresía" de la CE y el servicio diplomático europeo.

"Vivimos esto hace cinco años. Creo que estamos corriendo el mismo riesgo hoy", avisó el eurodiputado liberal finlandés Nils Torvalds, durante un debate en la Comisión de Pesca de la Eurocámara sobre el nuevo acuerdo pesquero que requiere el visto bueno de la institución. Su colega de partido, el luso Antonio Marinho e Pinto, también incidió en que hay "un problema jurídico grave" y que el acuerdo "no cumple" la sentencia previa. Además, avisó de que genera un problema de credibilidad que puede ser peligroso.