Reconozco mi especial reconocimiento a Astérix y Obélix por los grandes momentos que me han hecho pasar con sus historias. De aquí que me "apropie" una de sus muchas frases jugosas para titular esta crónica de un viaje injustificado de la Secretaría General de Pesca a la irrealidad en la adjudicación de cuotas de captura a las flotas de artes menores, volanta, rasco y palangre con puerto base en la provincia de A Coruña.

¿Un error o una compensación por algo que todavía no alcanzo a comprender?

Porque, vamos a ver: la flota volantera con base en puerto de la provincia de A Coruña no alcanza la veintena de embarcaciones. Y a esta miniflota se le adjudica, por arte de birlibirloque, el 25% de las cuotas accesorias de caballa destinadas en la misma provincia por cuanto, señala el Ministerio, la mitad de la flota volantera del Cantábrico tiene su base en puertos de A Coruña, y quiere garantizar a este pequeño número de barcos "una cantidad suficiente para sus capturas accesorias para todo el año", al igual que el resto de la flota de la modalidad de otras artes distintas al arrastre y cerco con base, también, en puertos coruñeses.

¿Por qué silencia la Secretaría General de Pesca, a cuyo frente continúa la coruñesa Alicia Villauriz, que los barcos de artes menores, rasco y palangre son bastantes más y que, en la pesca dirigida con anzuelos, la otra mitad liberada después de la segregación para incluir a la volanta, estas embarcaciones superan con mucho esa veintena de volanteros? ¿Qué interés existe „si no es dividir todavía más al sector„ en tal discriminación?, ¿qué gana el Ministerio que dirige el señor Planas con este tipo de acciones?

Hay incluso como una especie de regodeo cuando la Secretaría de Pesca destaca que, con tal reparto „incoherente, añado„ se "da por finalizado el proceso de ordenación y gestión de la campaña 2019".

¿Gestión?, ¿ordenación?, ¿cuando tan solo se tiene en cuenta "la problemática de la flota de volanta, dada su especial condición y la presencia de la mitad de esta flota en puertos base de esta provincia"?

¿Estima la Secretaría General de Pesca que las otras embarcaciones que no son de arrastre ni cerco no tienen vinculación con los puertos de esta provincia, que carecen de una problemática que solo reconoce a la volanta por "su especial condición"?

Sinceramente, el tiesto se le ha quedado muy pequeño a una Secretaría General que parece miccionar fuera del mismo cuanto intenta explicar una decisión tomada que parece encaminada, única y exclusivamente, a salvaguardar los intereses de una pequeña flota y no reconocer los mismos derechos a otra flota, muy superior, cuyos armadores y tripulantes tienen el mismo derecho a vivir.