Suponen todavía menos de un 5% de las infracciones detectadas, pero el control sobre la norma que prohíbe el descarte pesquero supone "problemas" para la Agencia Europea de Control de la Pesca (EFCA, por sus siglas en inglés). Por este motivo, el organismo ha recomendado el uso de sistemas electrónicos de monitoreo remoto (REM): la instalación de cámaras y sensores a bordo que permitan mejorar la vigilancia de esta norma que se aplica desde el pasado 1 de enero. El director ejecutivo de la agencia, Pascal Savouret, informó ayer que el organismo llegó a "una serie de directrices sobre la implantación" de estos sistemas tras formar un grupo de trabajo específico sobre el tema, aunque no se especificó cómo y cuándo se realizaría la visualización de las imágenes ni si se instalaría en toda la flota pesquera.

La EFCA presentó el Informe Anual de 2018 tras la reunión del consejo de administración del pasado miércoles. Como en años anteriores, el informe recoge que a lo largo del año pasado desarrollaron un total de 26.922 inspecciones, casi 6.000 más que en el año anterior, y se detectaron 714 posibles infracciones. En este sentido, la dirección de la agencia apuntó que en lo relativo a la norma de descartes „que obliga a llevar a tierra todas las capturas„ las infracciones por el momento suponen tan solo un 5%, siendo más importantes las que tienen que ver con el incumplimiento en las obligaciones de registro o las medidas técnicas.

Respecto a la posible utilización de las cámaras a bordo, la Comisión Europea ya explicó en Vigo durante la celebración de la Conferencia Internacional de Observadores y Monitoreo Pesquero (Ifomc, en inglés) que supone una "oportunidad" y que lo estaban "promoviendo" junto otras medidas de control. La agencia se creó a lo largo del año pasado un grupo de trabajo técnico sobre el tema para analizar las ventajas y desventajas de la medida, así como los requisitos necesarios.

Según recordó Pascal Savouret, el uso de sistemas REM figura en el borrador del reglamento de control (artículo 25) que se está discutiendo en la actualidad en el seno de Bruselas.

Sobre la labor del año pasado, el francés, acompañado por Pedro Galache y Mario Lopes, informaron que el alza de casi un 30% en las inspecciones se debe a los trabajos desarrollados por la agencia en tierra, tanto en los puertos como en las lonjas comunitarias, sobre todo en el Mar del Norte y el Mar Báltico. Junto a ello, también es significativo que ahora la EFCA controla un mayor número de pesquerías. Según Savouret, los datos sobre infracciones (que cayeron un 15% respecto a 2017) supone "una fotografía al instante" y que "se necesita tiempo" para comprobar si es una tendencia.