La primera misión del vehículo submarino autónomo Autosub Long Range (más conocido como Boaty McBoatface) ha arrojado luz por primera vez sobre un proceso clave que vincula el aumento de los vientos antárticos con el aumento de la temperatura del mar. Los datos recopilados de la expedición, publicados en la revista científica PNAS, ayudarán a los científicos a elaborar predicciones más precisas de los efectos del cambio climático en el aumento del nivel del mar. El Boaty recorrió 180 kilómetros a través de valles montañosos subacuáticos midiendo factores como temperatura y salinidad.