En el seno de la asociación Acerga „la mayor entidad del sector cerquero gallego, que aglutina 107 embarcaciones de esta modalidad„ se baraja con insistencia el nombre de José Saavedra Abruñedo ("Colomba") como el casi seguro sucesor de José Blanco, hasta hace unos meses presidente de dicha asociación.

Hoy a las 11.00 horas, en la sede de la Federación Galega de Confrarías, tendrá lugar la elección que determinará quién se hará cargo de "un pastel que nadie quiere", al decir de aquellos que desean fervientemente que José "Colomba", armador del cerquero Colomba III, con larga experiencia en la defensa de esa modalidad de pesca y uno de los cuatro hombres fundamentales en la constitución y defensa de Acerga, asuma tal responsabilidad. Pero es el propio José Saavedra „que ya presidió el sector cerquero de Pontevedra„ el que expone que la candidatura conlleva una gran responsabilidad y que quien ejerza como presidente necesita tiempo para dedicarlo al desempeño de esa función. No desecha la elección, pero aclara que Acerga y sus circunstancias precisan de una persona en la presidencia que disponga de tiempo para asistir a reuniones, entrevistas, mantener contacto con otras organizaciones... algo que él no tiene en la medida que estima necesaria para la entidad que los reúne. Por ello, y en el caso de que no surja alguna candidatura, baraja la posibilidad de delegar funciones en otra persona que lo represente y que mantenga las señas de identidad de una organización que, como Acerga, defienda en todo momento y lugar los intereses de los cerqueros integrados en la asociación.

No es una excusa, deduzco, sino un planteamiento para lograr que la asociación no solo se mantenga, sino que mejore sus prestaciones y luche en todos los frentes que el cerco tiene abiertos en Bruselas, en Madrid y en la propia capital gallega, Santiago, ciudad en la que parce es tan necesaria estar como lo es en cualquiera de las otras dos capitales porque la pesca al cerco no tiene más defensores que aquellos que la practican. Porque la entienden como algo residual, cuestión de un grupo de armadores y marineros gallegos que solo saben mirar a su propio ombligo cuando en realidad quienes miran a su ombligo son aquellos que siguen sin entender lo que es la flota de bajura y el papel que en esta desempeñan los aproximadamente barcos del subsector del cerco que existen en esta comunidad y de los que 107 están afiliados a Acerga.

Puede que la presidencia de esta asociación sea "un pastel que nadie quiere", pero Galicia no puede perderse un pastel que algunos pretenden destruir, por más apetitoso que sea, por ejemplo, el caladero nacional Cantábrico Noroeste.

Hoy saldremos de dudas: Acerga tendrá nuevo presidente que dé continuidad a la labor emprendida por José Blanco y sus compañeros de terna para, si es posible, no solo mantener sino mejorar lo conseguido (que no ha sido poco) y seguir luchando por sostener una modalidad de pesque que, se quiera o no, va asociada directamente con el modo de entender esta en Galicia.