El futuro de la pesca gallega cada vez se complica más. La falta de relevo generacional es un problema que arrastra el sector de la comunidad desde hace unos años. Además, la llegada de trabajadores procedentes de otros países se produce de forma esporádica y a cuentagotas. A pesar de ello, las cifras a cierre del mes de agosto superan a las de 2014. Galicia encadenó dos años de alza en la afiliación de extranjeros en el Régimen Especial del Mar (2017 y 2018), pero los últimos datos publicados del mes de agosto recogen un ligero descenso. Por lo tanto, los datos están un 5% por encima de los niveles alcanzados hace cinco años. La comunidad gallega contaba en agosto de este año con 1.351 cotizantes en actividades marinas que procedían de otros países, una cifra superior a los 1.286 contabilizados en agosto de 2014. Esto equivale a que el sector pesquero gallego cuenta con 65 profesionales extranjeros más que hace un lustro, aunque la mejor cifra fue la registrada en 2018, cuando había 1.358 empleados forasteros.

El grueso de los trabajadores foráneos de la pesca de Galicia proceden de países que no pertenecen a la Unión Europea (1.141, el 84,5% del total), mientras que tan solo 210 llegaron de países de la eurozona (el 15,5% restante). Esta proporción es bastante similar a la que se dio en 2014, cuando el 82% de los trabajadores foráneos procedía de estados extracomunitarios (1.056) mientras que el 18% lo hacía de países europeos (230).

Hace cinco años los líderes en este aspecto eran Senegal (con 201 afiliados) y Perú (con 186). En la actualidad, el primero ganó peso y los trabajadores senegaleses aumentaron hasta ser 341 en agosto del presente ejercicio, mientras que el segundo cuenta con 131 cotizantes en el Régimen Especial del Mar en Galicia „su presencia se redujo un 29,5%„.

El segundo país ajeno la Unión Europea que tiene más peso en la pesca de la comunidad gallega es Marruecos, que suma 152 trabajadores, tan solo seis menos que hace cinco años, cuando había 1558 profesionales marroquíes vinculados a actividades pesqueras. Tradicionalmente, los indonesios, los peruanos y los marroquíes eran los países que más mano de obra aportaban a la pesca gallega, situación que en algunos casos cambió.

Entre los estados europeos, Portugal lidera la aportación de trabajadores en la pesca gallega con 169. A pesar de esto, su presencia en el Régimen Especial del Mar en Galicia se vio reducida un 12,4% desde 2004, año en el que la cifra de empleados lusos en el sector gallego durante el mes de agosto ascendió a 193. En el cómputo global, Portugal es el segundo país que más trabajadores aporta, solo superado por Senegal.