El centro tecnológico AZTI, la Organización de Productores de Pesca Fresca de Marín (Opromar) y la Organización de Productores de Pesca de Ondarroa (Oppao) trabajan desde febrero en el proyecto MenDes 2, centrado en el desarrollo de nuevas herramientas para que los pesqueros, en este caso arrastreros, puedan cumplir con la obligación de desembarque. Tras analizar los datos obtenidos, se demostró que la aplicación de dispositivos selectivos en las redes del arrastre disminuyen las capturas no deseadas de ciertas especies sujetas a la norma que prohibe hacer descartes en alta mar.

El estudio tuvo un enfoque tecnológico y científico, y se desarrolló a bordo de embarcaciones pesqueras y cuenta con la verificación y el respaldo de los biólogos de AZTI y de los pescadores. Las especies en las que se centró el trabajo de investigación fueron jurel, merluza, gallo, bacaladilla y caballa „según explica AZTI son varios de los pescados más afectados por la obligación de desembarque„ y se realizaron pruebas experimentales de los dispositivos selectivos en dos de las modalidades de arrastre más usadas en el Cantábrico Noroeste: a la pareja y a la baca.

Estas pruebas incluyeron la evaluación de las prestaciones de las capturas en las redes de arrastre usando diferentes configuraciones: con mallas cuadradas de 80 milímetros en diferentes posiciones en el copo de la red, así como con un copo de malla cuadrada de 60 mm como alternativas al copo romboidal de 70 mm, según indica AZTI en un comunicado. Los resultados confirman que en los arrastreros que faenan a la pareja el panel de malla cuadrada de 60 mm situada en la parte inferior del copo de la red permite reducir de forma relevante la captura de merluza por debajo de la talla mínima. Situación que se da también de "forma especialmente destacable" en el jurel. El coordinador de Tecnologías Pesquera en AZTI, Esteban Puente, señala que estos efectos no se ven reproducidos en otras especies.

Los investigadores señalan que la implantación de estos dispositivos selectivos en los arrastreros tendrá un cierto impacto económico ya que se alterarían las capturas de otras especies comerciales. Consecuencias que Puente ve asumibles al tener en cuenta los beneficios que aportan a la flota, sobre todo a la de arrastre a la pareja.