La Fiscalía de Medio Ambiente del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) ha admitido a trámite la denuncia presentada por la Asociación de Veciños O Noso Burgo, Adega y la Cofradía de Pescadores de A Coruña contra la ampliación del aeropuerto de Alvedro. El Ministerio público especializado en delitos contra el medio ambiente ha abierto diligencias previas y ha abierto una investigación a raíz de esta denuncia.

Los tres colectivos consideran que la ampliación de Alvedro es una obra innecesaria que está "completamente fuera de lugar", ya que "en dos o tres años habrá una línea de AVE a Madrid y el indice de pasajeros se verá ampliamente reducido", destacó el presidente comarcal de Adega, Amancio Sotillo. Presentaron la denuncia ante el fiscal con el argumento de "indefensión ante la administración", ya que, según destacan, ésta "ni se molestó en contestar a las alegaciones de la cofradía ni Adega" . Consideran, además, que no es de recibo que el promotor de las obras, AENA, deje "a la improvisación" muchos de los aspectos recogidos en la declaración de impacto ambiental.

El patrón mayor de la cofradía coruñesa, Manuel Cao, advirtió de que las medidas correctores incluidas en el documento para evitar el vertido de lodos a la ría son insuficientes. "Explican que como la ría está declarada zona C (cuyos moluscos no se pueden comercializar en fresco) no habrá problema con el marisco y proponen instalar unas alpacas de ramaje para retener los sólidos en suspensión y en el peor de los casos, arar la ría y no lo vamos a permitir", advirtió. El representantes del pósito exige la instalación de una balsa que retenga los lodos.

El presidente de la asociación vecinal O Noso Burgo, Ramón Sixto, recordó que la ampliación en 400 metros de la pista del aeropuerto "para que las aeronaves puedan llevar más carga, que es la única justificación que han dado" también obligará a realojar vecinos y a insonorizar más de un millar de viviendas en O Burgo y casas en Alvedro y Almeiras, además de a trasladar numerosos elementos patrimoniales, "incluso una iglesia del siglo XII que también podría estar afectada". Según Sixto, que se preguntó por qué la declaración de impacto ambiental no recoge la alternativa de no ejecutar la ampliación, los vecinos no permitirán "ningún expolio y que los bienes se trasladen a Curtis u Ordes". Los tres colectivos pretenden que el fiscal dictamine si hubo "prevaricación" en la declaración de impacto ambiental y sostienen que aunque existe la opción de paralizar las obras de forma cautelar, "es difícil que suceda".