Los talleres de las redes oficiales de concesionarios recibieron 2.370 peticiones de reparación urgente durante los cinco primeros días desde la declaración del estado de alarma, lo que supone una actividad "prácticamente inexistente" (-99%) comparada con los 240.000 pasos de taller de media que registran semanalmente los concesionarios cuando operan a pleno rendimiento.

Así se desprende de las estimaciones de la Federación de Asociaciones de Concesionarios de la Automoción (Faconauto), que ya pidió desde el principio de esta crisis que los concesionarios cerraran no solo su actividad comercial, sino también su actividad en el taller para contribuir a frenar la pandemia.

Al mismo tiempo, la organización recomendó que las concesiones establecieran equipos de urgencia, sin estar abiertos al público, para dar servicio a sectores estratégicos en la lucha contra el coronavirus.

"Los datos de reparaciones de la primera semana desde el comienzo del estado de alarma ponen de manifiesto que los talleres oficiales han parado casi completamente su actividad, lo que ha permitido también salvaguardar la salud de sus trabajadores y clientes", señala Faconauto en un comunicado.

Garantizar la seguridad

La patronal, junto con la Federación de Industria, Construcción y Agro de UGT (UGT FICA), ha remitido una carta al Ministerio de Sanidad y a las correspondientes consejerías de todas las comunidades autónomas en la que se advierte de que, por la naturaleza del trabajo en los talleres, no es posible para los concesionarios cumplir con las medidas y actuaciones de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social relativas a situaciones derivadas del nuevo coronavirus y la protección de sus empleados.

En concreto, la carta se refiere a la imposibilidad de garantizar la distancia mínima entre empleados de un metro o de dos cuando no se dispone de Equipos de Protección Individual (EPIS), a que hay utillajes en los talleres que obligatoriamente comparten los operarios y a la existencia real de riesgo biológico de contagio en los coches manipulados, ya que, hasta la fecha, no existe un procedimiento verificado que permita higienizar los vehículos de clientes "con garantías sanitarias efectivas".

Tanto Faconauto como UGT FICA se comprometen en la misiva a mantener el servicio de urgencia en los talleres, pero piden que "se asegure que solo es necesario mantener trabajando a puerta cerrada al equipo proporcional y adecuado para prestar y garantizar estos servicios por motivos sanitarios para contribuir a frenar esta pandemia".