Fernando Franco ha conseguido el Goya como mejor director novel por su película "La herida", un drama intimista que supone el debut del sevillano, nominado el año pasado por su trabajo como montador de "Blancanieves".

"Me siento feliz y afortunado", ha dicho el realizador sevillano tras recibir el premio al mejor director novel en la XXVIII edición de los Premios Goya. La dicha ha resultado "doble" para el cineasta, ya que su amiga y protagonista en "La herida", Marian Álvarez, se ha llevado el Goya a la mejor interpretación femenina protagonista.

Franco se ha impuesto con este drama intimista a la catalana Neús Ballús, que competía con "La plaga", y a los madrileños Rodrigo Sorogoyen, director de "Stockholm" y Jorge Dorado, de "Mindscape". La película que ha coronado a Franco es la historia de una joven enferma mental con síndrome 'borderline', o Trastorno Límite de la Personalidad, que llegó a la gala con un total de seis nominaciones.

Detrás de las cámaras, y ya más relajado, ha confesado que, al escuchar su nombre, ha sentido "ganas de abrazar a todo el mundo", algo que podrá hacer en la fiesta que seguirá a los galardones. "Solo deseo tomarme una cerveza y celebrarlo a lo bestia", ha explicado el director, inmerso ahora en varios proyectos de montaje. El director tiene claro a quién dará el Goya. "Será para mi madre", ha afirmado el sevillano, quien ha recibido unas emotivas palabras por parte de la actriz Marian Álvarez cuando está ha subido a recoger su premio: "Fernando es de las mejores personas que he conocido en mi vida", le ha dedicado la intérprete.

Franco ha recibido, además, el reconocimiento de los premios Forqué y el premio especial del jurado en el último Festival de Cine de San Sebastián, donde Álvarez fue condecorada asimismo con la Concha de Oro por su interpretación.

El director ha trabajado como montador para directores como Montxo Armendariz, Santiago Zannou o el último, Pablo Berger, con quien hizo "Blancanieves", además de su "padrino", Jaime Rosales, que fue de los primeros en confiar en su proyecto de debut. También se ha intercambiado los papeles con su amigo David Pinillos, otro montador metido a director ("Bon apetit") que asumió el montaje de "La herida".