Los eurofans llevan esperando mucho tiempo la cita y, por fin, llega el momento en el que los focos iluminen el escenario del Pala Alpitour, en Turín, la 66ª edición de Eurovisión. Será el próximo 14 de mayo a las 21:00 horas cuando arranque la gran final del certamen en el que Chanel Terrero tratará de llevar a España a lo más alto.

Pero antes, el martes 10 y el jueves 12 de mayo, se celebrarán las semifinales, en las que no estará nuestro país, que pasa directamente a la final por ser parte del grupo de países que más aporta a la Unión Europea de Radiodifusión junto a Francia, Alemania, Reino Unido e Italia.

La actriz, bailarina y cantante nacida en Cuba parte como una de las favoritas para alzarse con el micrófono de cristal. Ucrania, Italia, Reino Unido y Suecia también se encuentran, a priori, entre los candidatos con más opciones a llevarse la victoria en un festival que cuenta con 65 años de historia.

Una historia que comenzó a dar sus primeros pasos en los años 50, con una Europa en plena reconstrucción después de la Segunda Guerra Mundial. Fue entonces cuando la Unión Europea de Radiodifusión (UER) ideó la creación de un festival donde participaran los países que formaban la UER y que sería retransmitido de forma simultánea. Concebido como un experimento tecnológico para la televisión en vivo, nació Eurovisión.

Fue el 24 de mayo de 1956 cuando se celebró en la ciudad de Lugano (Suiza) la primera edición del festival del que salió la primera ganadora: Lys Assia. La cantante, que representó a Suiza, se impuso con su tema ‘Refrain’ a Alemania Occidental, Francia, Luxemburgo, Italia, Países Bajos y Bélgica. Austria, Dinamarca y Reino Unido se inscribieron en el concurso, pero finalmente no fueron aceptados por hacerlo fuera de la fecha oficial.

En esta primera edición, cada país participaba con dos canciones, haciendo así un total de 14 actuaciones. 1956 fue el único año en el que cada participante podía presentar más de una canción, pues, el festival obligó a cada participante a presentar únicamente un tema.

Lys Aissa, que también fue representante de Suiza los dos siguientes años, entró a formar parte de la historia como la primera ganadora del concurso, aunque nunca se revelaron los datos pormenorizados de los resultados, algo que todavía hoy es un misterio. No han sido pocas las ocasiones en las que se han intentado obtener aquellas votaciones, incluso por medio de entrevistas con los miembros del jurado. Pero, hasta ahora, nadie ha conseguido destapar lo que aún sigue siendo un secreto.