'Wonder Woman': Una heroína con fundamentos

Una película superior que plantea la guerra desde un punto de vista sin precedentes en este tipo de cintas

Gal Galdot, en 'Wonder Woman'

Gal Galdot, en 'Wonder Woman' / Archivo

Antonio Dopazo

No es una aportación mediocre ni aburrida al universo de los superhéroes y ofrece motivos para sentirse medianamente satisfechos, especialmente porque contiene ingredientes inusuales y sin apenas precedentes en la pantalla, en concreto el de una superheroína que no hace olvidar por supuesto a Supergirl y Catwoman a pesar del fracaso que supusieron, y por encima de todo porque pone sobre la mesa cuestiones de ética y de humanidad a la hora de hacer frente a la guerra.

La propia postura moral al respecto de Diana, esta princesa de las amazonas que detesta unos conflictos en los que la muerte es colectiva y el individualismo ha pasado a mejor vida, pretende dar un enfoque totalmente distinto al tema. Por eso Wonder Woman, sin ser un producto de mucha envergadura, es superior a las últimas aportaciones al respecto. Sufre del mal más común de estos productos, su desmesurado a injustificado metraje, que aquí alcanza los 141 minutos y que genera desfallecimientos ostensibles, pero compensa con un apreciable sentido del humor y una descripción correcta de un clima apocalíptico.

Creada por William Moulton Marston, esta seductora y sensible heroína, que se incorporó a DC Comics hace más de 75 años, ha sabido ganarse una legión de admiradores que, finalmente y tras una larga y sorprendente espera, la disfrutan ahora en la gran pantalla. Lo hace con una primera aventura que resume el origen del personaje, una Diana muy bella y con superpoderes que ha crecido en una isla en compañía de otras amazonas y bajo el control de su madre, la reina Hyppolita y de Antiope. Alejada de la civilización, solo una enorme casualidad, el accidente que sufre en ese paraíso perdido un piloto norteamericano, Steve Trevor, le hará salir de un feudo tan maravilloso y exclusivo. Es entonces cuando comprueba que el mundo está inmerso en la primera guerra mundial y que la oleada de muertos y de heridos motivan que su solidaridad se abra paso entre el horror y la crueldad. Lo peor, con todo, es que se está empleando el mortífero gas mostaza para eliminar al enemigo.

Tracking Pixel Contents