Convencida de la necesidad de sacar a la luz historias del pasado que muchos se niegan a desenterrar, Blanca Suárez apuesta por la memoria histórica y la justicia a las víctimas en su nueva serie, Jaguar —que Netflix estrena este miércoles—, en la que se convierte en una cazanazis dispuesta a todo por vengarse. “Me parece necesaria, nos ilumina un poco a todos, a nosotros los primeros porque nos encontramos con unas historias de las que yo por lo menos no tenía una idea muy profunda”, señala la actriz.

Historias, las de los cerca de 10.000 españoles que acabaron en los campos de concentración alemanes y de los más de 40.000 nazis que se establecieron en España tras la Segunda Guerra Mundial y, con total impunidad, auspiciados por el régimen de Franco, tuvieron una segunda vida sin cambiar siquiera sus apellidos.“Pone este tema encima de la mesa, no solo el de las vidas de esos españoles diseminados por Europa y llevados a los campos de concentración, sino de qué manera en muchos países del mundo se les dio amparo a todos estos nazis huidos de su país, que llevaron unas vidas absolutamente felices y tranquilas”, añade la actriz.

En Jaguar, Suárez interpreta a Isabel Garrido, una joven española que logró sobrevivir al campo de exterminio de Mauthausen, al que llegó siendo una niña, y que está tras la pista de uno de los nazis huidos con la idea de acabar con él.

Todo ello hasta que se encuentra con los Jaguar, una banda clandestina formada por supervivientes del nazismo que no olvida los nombres ni las caras de los criminales con los que se encontraron y que se prometen no parar hasta llevarlos ante la justicia internacional.