Asomó su naricita respingona por nuestro país en 2018 en series como Sila y Ezel, cuando las ficciones turcas empezaban a abrirse paso en nuestras parrillas, pero Madre la llevó a convertirse en la reina de las series otomanas de Nova. Ahora que la pasión turca ya está totalmente desatada, Cansu Dere (Ankara, Turquía, 1980) protagoniza una de las grandes apuestas de Atresmedia, Infiel, los domingos, en horario prime time, y en su cadena principal, Antena 3, en la que reúne a nada menos que dos millones de telespectadores. De esta manera, aquella estudiante de Arqueología cuyos pinitos haciendo spots le abrieron la puerta de la interpretación se paseaba la semana pasada por Madrid, adonde acudió a recoger un premio de la Cámara de Comercio Hispano-Turca por su trayectoria profesional (y allí se enteró de que acababa de hacerse con un Produ, el Emmy latinoamericano) como las grandes estrellas. Sabía que las series turcas triunfaban, pero está empezando a darse cuenta de que su fama ya alcanza otra dimensión.
No obstante, la exmodelo de pasarela y aspirante frustrada a Miss Universo (el certamen se celebraba en Chipre, enemigo de Turquía, y no pudo ir) dice no sentir presión. “Estoy orgullosa de lo que hago y feliz de que estas series lleguen a tantas partes del mundo”, explica. Y eso es así por una razón. “Son historias que tocan al corazón”, asegura, a la vez que reconoce que el empoderamiento de sus personajes ayuda a mujeres “que sufren en la vida real”. Algo que se hace especialmente evidente en Infiel, una ficción basada en la producción americana Doctora Foster. La lucha de la doctora Asya, una mujer cuyo matrimonio y vida familiar eran perfectos hasta que descubre que su marido mantiene una relación con la joven hija de unos amigos, “sirve de inspiración a muchas mujeres en la sociedad turca”, asegura.
