Se estrenó Cristina Pedroche en 2021 como anfitriona de los solteros y solteras que viajaron a Canarias a buscar el amor televisado en Love Island y repite ahora con una segunda edición en la que anuncia, con la ilusión del primer día, que habrá pruebas nuevas y muchas sorpresas. Para empezar, esta vez los progresos de los isleños e isleñas, que es como se les llama a los participantes, se verán casi en directo. Y habrá un botón rojo para nominar, citas a ciegas… La aventura comienza hoy, a las 21.00 horas, con cinco dosis semanales en Neox y contenidos y un espacio en Atresplayer Premium. “Love Island viene en el momento perfecto, ahora que llega el veranito. Porque ves playas, a gente joven disfrutando…”, dice la presentadora.

Y esa gente a la que alude, que ha pasado un casting de 5.000 personas, es, a su parecer, lo mejor de lo mejor: “Esos diez chicos y chicas, más el chorreo de gente que va entrando, son muy divertidos y muy echaos p’alante”. Y todos heterosexuales, un aspecto que fue criticado en la edición anterior. “Es una cuestión de mecánica. Si fueran homosexuales o bisexuales, habría que cambiarla. Ojalá haya una edición Lgtbi. Yo, encantada de presentarla. Es algo que no está descartado”, asegura.

No cree, asimismo, que los nuevos concursantes tengan menos frescura por eso de que ya se sabe qué se encontrarán. Y que busquen tele más que amor. “Porque no se esperan muchos giros, que no solo sorprenderán a los telespectadores, sino también a ellos”, añade. Uno de ellos es el Botón Rojo, una de la nuevas pruebas que les descolocarán. Porque, pulsándolo, el concursante puede eliminar compañías molestas o rivales. Aunque pagando el peaje de que también será nominado y el público decidirá quién se va.