El desorden mundial creciente es ya una realidad. Que Trump se retirara del acuerdo sobre el cambio climático fue una grave amenaza para el futuro. Que el presidente americano haya impuesto tarifas proteccionistas a China y la UE es ya una realidad que preocupa cada día más al FMI, a la Reserva Federal y al BCE por las consecuencias a corto plazo sobre el comercio mundial y el crecimiento económico.

Trump siembra desorden y Europa está desconcertada y dividida.