En 2012 debiera haber entrado en funcionamiento la Intermodal coruñesa, obra esencial para la ordenación territorial, fachada marítima, tráfico, muelles liberados, etc., amén de las comunicaciones ferroviarias con Ferrol y Lugo y el convoy de contenedores. La falta de entendimiento entre la Xunta, Fomento (Autoridad Portuaria) y el Ayuntamiento local, trasladan a 2022 la terminación de las futuras obras: una eternidad. La realidad es triste. Entre tanto, en los jardines de Méndez Núñez se ha arbitrado una "parada" para los autobuses, a la intemperie, como en el subdesarrollo, al servicio de los usuarios periféricos, evidencia de que la confrontación y la beligerancia no sirven para planificar, con talento y paciencia, estrategias coherentes en beneficio de la ciudadanía. Otro tema sensible para los coruñeses, el abandono que por parte de Fomento y la Xunta sufre el aeropuerto de Alvedro. Don Gustavo García, presidente del Comité de Empresas, ha ilustrado en LA OPINIÓN (25-11-18) los pretextos infundados de AENA al respecto, tales como no cumplir el Plan Director y no atender otras necesidades básicas como una plataforma para la aviación, un hangar para el Helimer de los servicios de emergencia y salvamento, terminal de carga, accesos desde la autopista y ampliación de la terminal. Pese a tantas dificultades, Alvedro ya alcanzó la cifra de viajeros que le habían fijado para 2021 (1,2 millones de usuarios), pese a contar con la cuarta parte de vuelos que Lavacolla y la mitad que Peinador. El mantra de AENA ya no cuela y hay que afrontar la realidad de nuestro servicio público aeroportuario, que gravita sobre el área de mayor población de Galicia y de un enorme potencial industrial, el más importante de la región. A cualquier observador, no le faltará enjundia para valorar la realidad y no ocultarla. Los usuarios sienten hastío de tanta simulación oficial y también del tiempo y de la distancia, cuando tienen que desplazarse a 70 kilómetros y añadir unos 100 euros sobre el precio de su pasaje.

Otrosí digo

Resulta acertada la iniciativa del Ayuntamiento coruñés de licitar el patrocinio de vuelos desde Alvedro. Al parecer Vueling ampliará su oferta a 434.000 asientos durante el próximo verano. Reiteramos que la pasividad de la Xunta y el 'verlas venir' de Fomento no impidan al Ayuntamiento coruñés retraerse ante la falta de oxígeno (voluntad) de los poderes central y autonómico. Alvedro, tema tan sensible para los coruñeses, bien merece una reacción cívica. Estamos en el momento oportuno.