Alvedro cerró en 2018 el segundo mejor año de su historia, con un registro anual de 1.225.763 pasajeros. El tráfico de viajeros en el aeropuerto coruñés es el que más crece en las tres terminales gallegas, supera por cuarto año consecutivo el millón de usuarios y encadena ya 33 meses seguidos al alza.
La incesante progresión en las estadísticas de Alvedro no solo se mantiene también en los primeros compases de 2019, sino que ha batido un récord histórico. Ni los desvíos ni las cancelaciones que provocó la niebla en enero pasaron factura a la venta de billetes con origen o destino en A Coruña. Un total de 91.143 viajeros volaron el mes pasado con alguna de las compañías que aterrizan o despegan en la terminal coruñesa, lo que supone un 8,8% más que los viajeros registrados hace un año, que fueron 83.800.
No es un dato aleatorio más, sino que está cargado de significación: es el primer mes de enero en el que Alvedro supera los 90.000 pasajeros en toda su historia.
Estas cifras consolidan al aeropuerto de A Coruña como el segundo en demanda de la comunidad, ya que capta uno de cada cuatro usuarios de las tres terminales gallegas y moviliza casi un 30% más de viajeros que Peinador, según las últimas estadísticas hechas públicas por AENA esta semana.
La terminal aérea coruñesa comienza así el año no solo con unas cifras de pasajeros récord, sino que además protagoniza también el mayor crecimiento de los tres aeropuertos de la comunidad respecto a enero de 2018. Le sigue en esa tendencia al alza Vigo, que con casi 71.900 viajeros durante el mes de enero repuntó un 5,5% en el último, aunque se queda con casi 20.000 pasajeros menos que los captados por la terminal coruñesa en enero, con una media de 700 pasajeros menos cada día.
El peor arranque del año corresponde al aeropuerto de Santiago que, pese a ser la terminal con mayor demanda en Galicia, con un 52% del tráfico aeroportuario de la comunidad, registró en enero un aumento de solo el 1%, hasta rozar los 178.800 usuarios.
Hay que remontarse más de una década para encontrar el dato más cercano a este récord de 90.000 pasajeros en un arranque de año en Alvedro. El aeropuerto coruñés registró entonces 88.866 viajeros, una cifra que auguraba grandes esperanzas que se truncaron por el comienzo de la crisis económica.
Alvedro se quedó en 2018 a solo 41.000 pasajeros de su récord anual absoluto, alcanzado en 2007 con un tráfico de 1.266.795 usuarios, la mejor cifra alcanzada hasta ahora desde su inauguración en 1963. Los datos de enero apuntan a que este récord histórico será superado muy probablemente en 2019.
A esta previsión de un mayor crecimiento de la actividad en el aeropuerto coruñés contribuirán las nuevas conexiones de Vueling con Bilbao y Málaga a partir de marzo, con una frecuencia de hasta dos vuelos semanales en ambos destinos. Esta misma compañía, que ha puesto ya a la venta cerca de medio millón de asientos para A Coruña con rutas naciones e internacionales este verano, aumenta también los enlaces con Sevilla a siete semanales. La ampliación de la oferta de Vueling en Alvedro con la conexión a la capital vasca se produce después de que la aerolínea Volotea anunciase que enlazará A Coruña con Bilbao a partir de abril, un destino que la primera había dejado de operar en diciembre de 2016.
Esta competencia entre aerolíneas es la mejor prueba del creciente potencial del aeropuerto coruñés. Y un alivio para las arcas públicas, ya que las dos nuevas rutas de Vueling comenzarán a operar en la época estival sin ningún tipo de aportación municipal.
La eclosión de Alvedro en los tres últimos años contrasta sin embargo con el rango de inversiones que AENA depara a la terminal coruñesa, que no se corresponde con las que debería recibir de acuerdo con su incesante aumento de tráfico de viajeros.
La cifra de usuarios de un aeropuerto es clave para estipular las inversiones que se deben acometer para sus necesidades. AENA basa precisamente en las proyecciones de pasajeros las inversiones programadas en el plan director para el aeropuerto coruñés hasta 2030, entre las que figura la ampliación de la terminal y la mejora de la pista por 137 millones de euros.
El plan estipula que Alvedro llegará a alcanzar en 2030 los 1,6 millones de viajeros y que el edificio destinado a su tránsito debe incrementar su superficie en 5.000 metros cuadrados si en 2028 se llega a los 1,3 millones.
La realidad ha dejado obsoletas estas previsiones. Los datos de tráfico en el aeropuerto coruñés apuntan a que en este año 2019 se alcanzará o superará ya la cifra de pasajeros prevista por AENA para 2028, es decir, una década antes. Lo que en la práctica significa que las inversiones necesarias en Alvedro han sido calculadas a la baja.
El Concello coruñés, que ha reclamado reiteradamente al Ministerio de Fomento una revisión al alza de las inversiones consignadas para la terminal coruñesa, denuncia el agravio comparativo constatado en las partidas presupuestarias entre 2017 y 2020: solo 6 millones para Alvedro, frente a los 9 de Peinador y los 14 de Lavacolla.
Una de las columnas que sostiene el creciente potencial que demuestran las cifras de récord del aeropuerto coruñés es su asentamiento en el área que alberga el motor económico de Galicia. Esa es una de las principales cuestiones en juego al demandar un trato justo para Alvedro.
