Abril es un mes en el que se mezclan la memoria y el deseo, un periodo en el que la evocación da al viento su melancolía, mientras el relativismo causa estragos en los principios de la verdad histórica. Bioy Casares, refiriéndose a los relatos históricos, aseguraba: "Si nos quedamos cortos, la historia es inoperante, si se nos va la mano, escribimos una caricatura". Carmen Iglesias, la única española doblemente académica de la Lengua y de la Historia, preceptora que fue del actual rey de España, escribió: "La historia muestra que partiendo de individuos enloquecidos, la realidad puede cambiarse en pesadilla". Son dos personalidades prestigiosas para tener en cuenta en una época en la que el tiempo histórico avanza precipitadamente a trompicones. Galicia, en tanto, vive en las nubes de la paradoja. El titular de la Xunta continúa en su particular naumaquia lingüística frente a los postulados de su líder nacional: "No será obligatoria la exigencia de una lengua cooficial para optar a cualquier oferta de empleo", a la vez que las Academias de la Lengua Española se reunían en Córdoba (Argentina) y lamentaban el abuso de tecnicismos en inglés, complejo atribuible a economizar vocablos (El español es el principal vector de la implantación de nuestras grandes empresas en América). La actual presidenta del Consejo de Estado, presente en la asamblea académica, reivindicó el lenguaje inclusivo, que circula en dirección opuesta, que el rector de la Academia Mexicana de la Lengua aclaró con el siguiente ejemplo, cuasi esperpéntico, tenemos que decir: "El perro y la perra son el mejor amigo y la mejor amiga de la mujer y del hombre, indistintamente y no siempre respectivamente". Sin comentarios.

Se nos fue Sánchez Ferlosio, escritor de culto, uno de los grandes narradores del último siglo. Escrito versátil, fabulador inclasificable, su obra El Jarama, su novela más conocida es, con La Colmena de Cela y Tiempo de Silencio de Martín-Santos, referencia literaria de la posguerra.