E n el futuro, comentar fotos (en las redes sociales) parecerá algo pintoresco para aquellos que crecieron jugando juegos online con sus amigos donde pueden construir grandes ciudades bloque por bloque, explorar nuevos planetas, montar una banda o un grupo de baile independiente, o competir para ser el último equipo en pie en sus deportes favoritos. Así serán las redes sociales del futuro: experiencias virtuales inmersivas, cooperativas, a gran escala, dirigidas a una amplia audiencia. Simplificando mucho: como el Fortnite pero a lo bestia. Un nueva existencia online, envolvente y multitudinaria, convertirá las actuales interacciones por Instagram, Twitter y Facebook en algo primitivo. Lo profetiza Andrew Chen, socio del fondo tecnológico de inversión Andressen Horowitz, la compañía de referencia de Silicon Valley que está detrás de los protagonistas de la revolución digital. En su cartera de inversiones hay 240 empresas, entre ellas algunas tan relevantes como Facebook, Airbnb, Instagram, Buzzfeed, Pinterest y Skype. Por eso lo que digan en Andressen Horowitz hay que tenerlo siempre en cuenta.

Y ahora están convencidos de que han emprendido el camino hacia el "nuevo paradigma" de las redes sociales, esos lugares digitales "donde las personas pasan tiempo con sus amigos, familiares y otras gentes con los mismos intereses". Ese camino se adentra en el territorio de los juegos multijugador. Las nuevas redes serán "plataformas jugables y dirigidas a una amplia audiencia". Lo que acaba de escribir Andrew Chen en el blog de Andressen Horowitz. Esa orientación tiene sentido "porque ahora generaciones enteras de niños crecen con miles de horas de juego creativo y social como parte de su vida social diaria. Y las personas no solo juegan a los juegos, sino que ven a otras personas jugarlos". La evolución de los videojuegos está siendo vertiginosa. Un dato: el año pasado, el videojuego online League of Legends tuvo una audiencia de más de 200 millones de personas simultáneamente. "Eso es más del doble del evento más grande de la NFL (la liga de fútbol americano)", precisa Chen.

Las nuevas redes nacerán del deseo natural de las personas de tener "conexiones digitales con otras personas de una manera visual, creativa y emocional". De hecho, eso es lo que estábamos haciendo los seres humanos hasta que nos implantaron un teléfono móvil. En el futuro las redes sociales serán un nuevo mundo digital donde replicaremos ese ineludible carácter inmersivo que tiene la realidad. Pero con una ventaja: ahí "dentro" no estaremos limitados por las leyes de la física. Como ocurre en los videojuegos, todo lo imposible es posible.

Andressen Horowitz ya financia esa nueva gran experiencia colectiva en internet. Acaba de invertir 16, 5 millones de dólares en la empresa de juegos Singularity 6, promovida por Aidan Karabaich y Anthony Leung, ex líderes de Riot Games, la compañía creadora de League of Legends. Prometen una nueva "sociedad virtual". Anthony Leung define así lo que quieren hacer: "Combinar una comunidad virtual fuerte con un juego profundo y convincente". A eso, antes, lo llamábamos "vida".