"Distancia, distancia", alertó ayer el gerente del hospital, Luis Verde, al grupo de periodistas que se le acercó para conocer las noticias relacionadas con la evolución de las pruebas que los sanitarios realizaron a los jugadores del Fuenlabrada. El ambiente, enrarecido y tenso por el polémico desplazamiento del equipo madrileño a la ciudad con contagiados por Covid, que provocó la suspensión del partido contra el Deportivo, motivó que Verde primero se alejase a unos tres metros de la prensa para hacer declaraciones. Como los profesionales no captaban bien sus palabras se acercaron, momento en que el gerente pidió que se respetasen las distancias de seguridad.