No solo en Galicia sino en toda España es bien conocida la Playa de las Catedrales por esos arcos de piedra que la acción del mar ha dejado en un acantilado muy concreto de la costa de la mariña lucense. Otra denominación singular son las cumbres de la Mujer muerta, en la sierra de Guadarrama, pues asemejan al cuerpo de una mujer tendida. Y de esa misma zona por la que anduve recientemente pero que no he logrado disfrutar ni identificar ciertos parajes, y bien que me gustaría haberlo hecho para ahora poder describirlos y en algunos casos explicar el porqué de esas denominaciones, tales como el Moño de la tía Andrea -que no es un vulgar localismo, sino que así figura en los planos topográficos- y otros tan singulares y relacionados con Galicia como la Cruz de la gallega o la Fuente matagallegos; a propósito de esto último me cuentan los habituales de la zona que esa era ruta habitual de las cuadrillas de segadores gallegos que empezaban la siega por tierras del sur para luego ir subiendo a cosechas más tardías y quizás algunos imprudentemente se empachaban de aguas frías venidas de los heleros y ello tenía trágicas consecuencias.
