De madre española y padre indio, ha sido doctor en Teología, en Ciencias y en Filosofía, Raimundo Paniker. Publicó uno de sus primeros trabajos bajo el título de La India. Gente, Cultura y Creencias en 1960 y ya con el nombre de Raimon Panikkar diría aquello de “Soy cien por cien catalán y cien por cien hindú” y muchos se llevarían quizás las manos a la cabeza. Su obra es tan extensa que no llegarían muchos seminarios para hablar de ella, quizás haya sido ese uno de los muchos motivos por los cuales la editorial Fragmenta ha publicado Panikkar. Una biografía, con una traducción de Jordi Pigem. Su autor, Maciej Bielawski, no conoció a Panikkar a fondo, pero sí ha hablado con personas cercanas y ha recogido informaciones que forman el cuerpo de este volumen y nos acercan al hombre que hizo de su Cristo desconocido del Hinduismo su señal de identidad. Se habla de esa parte intelectual que todo profesor tiene y faltaba, como apunta el propio Bielawski, esa “otra parte” de un autor que como él mismo apuntó en su Espiritualidad hindú. Sanatana Dharma quiso navegar por el mundo de los hombres.

María Josefa González Haba y Raimon estuvieron juntos durante 62 años y oficialmente casados durante 26 años. Se han escrito monográficos, como el publicado por Anthropos hace unos años, donde en sus páginas hablaban sobre esta autoridad en el mundo del espirítu.

Y en Galicia ha sido el profesor Victorino Pérez Prieto quien en dos trabajos no solo hablaba de ese lado personal de Panikkar, a quien llegó a conocer y visitar en su residencia de Tavertet, sino de ese místico del siglo XXI de nuestros días. En su Dios, Hombre, Mundo. La trinidad en Raimon Panikkar con un prólogo de Xabier Picaza Pérez Prieto, tras haber realizado todo un trabajo de documentación, nos sorprende con algo sobre Panikkar que era muy necesario... Y en su Más Allá de la Fragmentación de la teología. El Saber y la Vida: Raimon Panikkar estamos ante un verdadero complemento del anterior y con un prólogo del propio Panikkar.

“Cristo es el símbolo humano del hombre plenamente realizado, diría el hinduismo o plenamente divinizado, añadirían otras religiones entre las cuales está el cristianismo. La religión que llamamos cristiana cree que Jesús es el Cristo, pero otros pueden reconocer este símbolo en otros seres humanos”. Nos acerca no solo a la obra de un autor sino a un momento o época que le ha tocado vivir. Existen una serie de autores que son conocidos por esa gran faceta intelectual y sus encuentros con Octavio Paz entre otros... pero al leer sus distintas obras no solo nos quedamos con ellas sino con un momento histórico que les ha tocado vivir.

Su hermano, Salvador Paniker, en sus libros de memorias también habla de ese momento y del inicio de sus actividades fundando la editorial Kairós que ha cumplido ya los cincuenta años de existencia sino que también descubre a ese hermano indio que ambos, Raimon y Salvador, fueron a visitar salvo que uno iba con su elegante traje y el otro, Raimon “al parecer, se los metió a todos en el bolsillo sentándose en el suelo, al estilo indio, y recibiendo la bendición de la primera esposa de su padre”. Salvador iría a la India una sola vez y conocería al sabio Jiddu Krishnamurti. Raimon, del que nos ocupamos, estaría durante un tiempo en la ciudad de Benarés, donde se encontraría con muchos intelectuales de la época intentando ese “encuentro entre el ecumenismo y el Oriente”. En 1999 recibe el Premio Espiritualidad entre otros por su El mundanal silencio, donde “realiza una profunda reflexión entre lo espiritual y lo mundano. No se trata de huir del mundo sino de transfigurarlo, de verlo renacer”. Al día de hoy coordinado por Xavier Xerra Narciso es esa Una Cristofanía con traducciones de Montserrat Camps, Esteve Serra Arús y Josep Torres Rodergas y una edición de Jordi Pigem, coordinador de los primeros tres volúmenes de la edición catalana de la Opera Omnia Raimon Panikkar (Fragmenta, 2009-2010). Ahora publica Ecosofía. La sabiduría de la Tierra, algo muy necesario, donde “La Tierra no es una simple suministradora de materias primas para la Humanidad. Es nuestro cuerpo externo, nuestro espacio vital, nuestro hogar”, algo que debió de haber escuchado Joan Mascaró (1897-1987) profesor de Sánscrito de Panikkar, con quien mantendría correspondencia y escribir en su tumba en catalán y en inglés las palabras de Arjuna en la Bhagavad Gita :“Venimos de Dios, vivimos en Dios, vamos a Dios”.