Opinión
Joaquín Leguina
Joaquín Leguina viene ejerciendo en los medios desde hace años, con la mordacidad característica, una clara disidencia de la actual línea política del PSOE, ¿pero es motivo bastante para expulsarlo de su partido? Tratándose de una medida de semejante dureza con alguien de tan largo y potente historial de militancia sería más justo valorar su trayectoria para ponderar la gravedad de la reciente disidencia. Leguina ha sido en realidad el presidente fundador de la Comunidad de Madrid y la impronta de sus obras —en las que siempre han mandado las ideas— aún perdura, pese a tantos desmoches y desguaces posteriores. En quienes lo hemos conocido y tratado algo queda también la huella inconfundible de un estilo, mezcla de inteligencia, corazón e ironía. Un partido que alardea tanto de historia no puede permitirse el lujo de extirparse parte de ella con un fácil expediente de expulsión.
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