Opinión | Mujeres

Feminismo en ‘prime time’

Hizo su aparición eufórica, bajo palio, porteada por las jugadoras del equipo de rugby Hermo Soto del Real y procesionando al ritmo del Toxic de Britney Spears. Henar Álvarez, guionista, monologuista, cómica, escritora, ahora presentadora, desplegó el domingo toda su personalidad en el estreno de Al cielo con ella, el late show que le produce Jordi Évole y que se emitirá semanalmente en streaming, en la plataforma RTVEPlay.

A Henar Álvarez, en este proyecto, le han cumplido todos sus deseos. Le han levantado un trono en mitad del escenario del madrileño teatro Quique San Francisco, donde se graba el programa, con un público entregado; le han puesto una banda en directo, con la que se arranca a tocar y cantar; en el primer programa tuvo como madrina a Eva Hache, que hace quince años la precedió presentando un formato televisivo similar.

También le consiguieron una invitada estrella, la escritora Elvira Lindo, que en su día le dedicó una reprimenda en una de sus columnas a cuenta de los consejos sexuales que repartía metida en su personaje de la «chochoctora». En su encuentro televisivo, con el pretexto de los 30 años de Manolito Gafotas y el lanzamiento de una edición conmemorativa de la colección de libros, Elvira Linda quiso ser conciliadora, consoladora incluso, con su anfitriona.

Henar Álvarez, además, estuvo arropada por Victoria Martín y Bianca Kovacs, cómicas y antiguas compañeras, y ella, militante, decidió que su primera entrevistada fuera Vania Arana, la portavoz de las Kellys de Barcelona.

Genio y figura. A Henar Álvarez, se le pueden cuestionar las formas y el tono, se podrá debatir si es oportuno y necesario, y si está bien llevado, un formato tan provocadoramente feminista como el de Al cielo con ella, pero no hay duda sobre su capacidad de trabajo, su energía y su entusiasmo.

Durante una temporada, hace más de diez años, Henar Álvarez presentó Días de cine en La 2, ha sido guionista, bloguera, colaboradora de radio, podcaster, monologuista, a menudo todo a la vez. Ha escrito una novela, Ansia.

Domina las redes, es descarada, provocadora, tiene una legión de incondicionales, es más lista que el hambre, rápida como una centella. Sabe de historia y de santería, y de muchas otras cosas, era la empollona de la clase, es curiosa y muy inquieta. Molesta, a veces mucho; se le podría pedir que bajara el tono, que se lo pensara dos veces, pero resulta convincente, parece que va de veras y de frente. Hay que reconocerle la valentía.

En Al cielo con ella, Henar Álvarez se da un homenaje y, teniendo en cuenta todo el esfuerzo a sus espaldas, no parece inmerecido.

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