Opinión | Shikamoo, construir en positivo

Volver a empezar, ¡ya!

No se alarmen, queridos y queridas. Ni me voy a emprender a Turkmenistán ni me han embargado los escasos bienes de que dispongo y tengo que comenzar otra vez de cero. Cuando digo «volver a empezar» ni me refiero a una opción de vida rupturista con el pasado, ni al hecho de que haya sucedido —al menos hasta donde yo conozco— algún cataclismo en mi entorno próximo, que haya provocado tal situación de nuevo comienzo. No. Cuando digo esto simplemente les hablo de que, después del paréntesis más o menos extenso en Navidad, todo arranca de nuevo hoy mismo, con nuevos bríos en este 2025 recién estrenado, pero del que hemos consumido ya siete jornadas de trescientas sesenta y cinco. Nada más y nada menos que casi un dos por ciento del mismo, por mucho que nos parezca que era ayer cuando tomábamos las uvas al son de las doce campanadas más escuchadas de cada anualidad. Hoy comienza el curso académico, muchas personas se reincorporarán al trabajo después de más o menos días de vacaciones y, de alguna manera, la vida recomienza después de toda esta parafernalia de luces, turrones y un consumo exagerado que ahora aún presenta continuidad —por si acaso no hubiese sido este suficiente— de la mano de la versión actual de las rebajas... Hoy volvemos a empezar, sí, y aquí seguimos...

Es verdad que estos también comenzarán a ser días más tranquilos para todo ese ejército de personas que ha hecho posible todo lo vivido en estos últimos días y semanas. Porque si hay días complicados en sectores como el de la hostelería o el comercio, estos son los de Navidad. Espero que todas aquellas personas para las que Navidad significa todo lo contrario a vacaciones tengan oportunidad ahora de pisar un poco el freno de su propio ritmo vital, y puedan descansar. Es que, oigan, es bueno desear para los demás exactamente lo que uno quiere para sí, y si hay quien ha podido descansar más en este período, nobleza obliga a pensar en algo simétrico para los demás.

Hay quien dice que estos primeros días de enero son, sobre todo, de propósitos para el año que empieza, que con frecuencia —aunque no siempre— van decayendo al ritmo que pasan los meses. Yo no lo tengo muy claro, porque aunque es verdad que los años comienzan en enero, cada vez es más en septiembre cuando toda suerte de actividades se ponen en marcha, siendo el tiempo propicio para comenzar con los idiomas, los gimnasios y esas otras cuestiones que, como digo, trufan estos días las recién estrenadas agendas de 2025. Déjenme que les desee en estas líneas que les vaya fenomenal en todo aquello que hayan decidido comenzar. Y ya saben, no se torturen si al final el tiempo no da para tanto. Al fin y al cabo, lo importante es ir convergiendo hacia los objetivos marcados, en la medida de lo posible y sin que la ansiedad por conseguir un determinado hito vaya en detrimento de la salud, ¿no?

Poco más les cuento hoy... Por mi parte, volver con ilusión renovada a la tarea, pensando que cada día es netamente diferente del anterior, único e irrepetible. Que cada día es la ocasión propicia para crecer un poquito más tanto individual como colectivamente, entendiendo esto sobre todo en clave de valores aportados y compartidos. Sí, cada día es especial, y ya saben que nunca volverá...

Sean felices en este arranque de 2025 para casi todo... Disfruten de lo compartido, de lo que reciban y de lo que tengan oportunidad de entregar, tanto en su desempeño profesional como en ese otro montón de actividades y acciones que todas y todos realizamos de forma más personal. Al fin y al cabo, la cuestión es estar, contarlo y disfrutarlo mientras sea posible. Y, eso sí, pensando también en quien se va quedando en cada uno de los instantes, recogiendo con cariño y agradecimiento el guante de su aportación y su testimonio personal de vida, y tratando de proyectarlo en nuestro propio recorrido, siempre e indefectiblemente hacia adelante. Porque ya se sabe que el tiempo, variable singular donde las haya en la Física, transcurre a nuestro nivel macroscópico y material siempre hacia adelante...

Feliz 2025 y... ¡adelante! Comenzamos... ¡Ya!

Tracking Pixel Contents