Con la subida de las temperaturas no hay nada más apetecible que comer una crema fría. Y entre la gran variedad de las que disponemos en la comida mediterránea, el salmorejo es una de las más ricas y saludables. 

Esta crema vegetal fría, típica de la cocina andaluza y española, destaca por estar elaborada con componentes mediterráneos como son el tomate, pan, ajo, aceite de oliva y vinagre. Elementos todos ellos que contribuyen de forma muy clara a la salud. 

Pues bien, un equipo multidisciplinar formado por investigadores del CSIC del Instituto de la Grasa (IG-CSIC) de Sevilla, la start-up Oleica y la empresa cordobesa Culinary Concepts Group (Salmoreteca) ha dado un paso al añadir al salmorejo un fermento natural convirtiendo la típica crema cordobesa en una crema vegetal probiótica lista para el consumo. 

Es decir, igual que existen yogures probióticos, también vamos a poder tomar salmorejo probiótico.

Los probióticos son microorganismos vivos que tienen efectos beneficiosos en la salud.

¿Qué son los probióticos?

Los probióticos son microorganismos vivos que tienen efectos beneficiosos en las personas, y los mismos pueden ser ingeridos por los alimentos. 

Así, tras más de dos años de estudios, los investigadores españoles han logrado añadir un fermento natural denominado Lactiplantibacillus pentosus (LPG1) al salmorejo.

Y gracias a eso, este salmorejo 'probiótico', que se comercializará como producto fresco refrigerado sin tratamiento térmico, lleva más de mil millones de fermentos activos por tarrina.

Durante los más de dos años que se han invertido en desarrollar el producto, se ha estudiado la supervivencia de L. pentosus LPG1 en la matriz de salmorejo en diversas condiciones.

 Además, al tratarse de un producto fresco no pasteurizado, se ha estudiado también la actividad bioconservante del fermento contra diversos patógenos alimentarios como son Listeria monocytogenes, Staphylococcus aureus, Salmonella enterica y Escherichia coli.

Para ello se han desarrollado ensayos de desafío en los que se inocula artificialmente el patógeno a altos niveles poblacionales en presencia del fermento. 

Durante todo el proceso de desarrollo se estuvo en comunicación con inspectores de la Consejería de Salud y Familias de la Junta de Andalucía, los cuales realizaron la supervisión de todos los ensayos para garantizar la salud del consumidor, al tratarse de un producto listo para consumir.

Este nuevo producto lo podrán utilizar aquellos consumidores con intolerancia a la lactosa y que no pueden consumir probióticos a través de productos lácteos.

¿Qué ventajas tiene tomar este salmorejo probiótico?

“Una de las grandes ventajas que tiene L. pentosus LPG1 es que se trata de un fermento natural aislado del proceso de elaboración de la aceituna de mesa, por lo que su aclimatación y viabilidad en otra matriz vegetal como es el salmorejo es muy alta comparada con otros microorganismos probióticos cuyo origen no sea vegetal", explica Francisco Noé Arroyo López, investigador del IG-CSIC.

El potencial probiótico de LPG1 ha sido validado en diversos estudios in vitro e in vivo, el último en un reciente ensayo clínico de fase 1 llevado a cabo con investigadores del Instituto Maimónides de Investigación Biomédica de Córdoba (IMIBIC).

Te puede interesar:

  • "Este nuevo producto se podrá utilizar como fuente de microorganismos beneficiosos para consumidores que tienen un cierto grado de intolerancia a la lactosa y que no pueden consumir probióticos a través de productos lácteos, o que necesiten una dieta baja en colesterol. Todo ello sumado a las ventajas nutricionales que de por sí ya aporta el salmorejo a la dieta, como es ser fuente de licopenos, vitamina C, ácido oleico, polifenoles, etc.", concluye el doctor Arroyo López.

La Universidad de Córdoba (UCO) también ha contribuido en el lanzamiento al mercado de este nuevo alimento, gracias a la emisión de informes y la comunicación con las autoridades sanitarias, lo cual ha permitido su reconocimiento como un producto seguro y con el etiquetado de probiótico.