José Manuel Suárez Sandomingo: "No hay que saturar al niño de juguetes, porque eso lo maleduca"

Contra todo pronóstico, los Reyes Magos esquivaron el impacto de la crisis y, un año más, colmaron de regalos a los niños gallegos, algo que, según el presidente de la Asociación Profesional de Pedagogos de Galicia (Apega), José Manuel Suárez Sandomingo, perjudica el desarrollo de los pequeños.

-¿Es contraproducente que los niños reciban tantos regalos en Reyes?

-Sí. La cifra debe ser limitada, porque los niños ya reciben regalos durante todo el año. Lo único que se consigue así es que la casa se llene de juguetes que luego ni siquiera utilizan. Yo les aconsejaría a los padres que cuando den los regalos a sus hijos, se fijen en cuáles captan su atención. Los demás hay que dejarlos a un lado, para cuando ese primer artículo que les ilusionó pierda su valor. Entonces es cuando se le deben ir entregando los demás, según el interés que susciten en el niño. Así, éste siempre va a tener a su disposición un juego, pero no todos al mismo tiempo, porque esto le terminaría aburriendo. Los tendría todos, pero no juegaría con ninguno.

-¿Cuál es el número recomendable de regalos?

-Los padres deben decir a los demás miembros de la familia que compren un único juguete, y no dos o tres. Lo máximo debería ser un juguete por cada persona que le vaya a regalar. La comunicación entre los diferentes miembros de la familia, por tanto, es fundamental. Al niño se le puede presentar un catálogo o fijarse en los dibujos que ve en la tele para conocer sus preferencias. Todos los años hay un juguete que es más especial, porque lo piden los demás niños también o porque es más llamativo. Muchas veces, lo que le llama al niño es lo diferente, lo único, lo que puede compartir con otros... Muchos padres piensan que por ser un regalo muy caro va a gustar, y eso no es así.

-¿Sería aconsejable, en fechas como la Navidad, en las que el niño recibe muchos regalos, entregárselos de forma escalonada?

-Efectivamente. Ésa sería una buena estrategia. Los padres tienen que ser conscientes de que, si el niño recibe regalos de forma masiva, eso lo va a estropear, en el sentido de que no va a percibir la ilusión. Y ahí radica la esencia de los regalos. El regalo tiene que emocionar, sino se convierte en rutina.

-Desde un punto de vista pedagógico, ¿cuáles son los juguetes más recomendables para regalar a un niño?

-Depende de cada edad y depende de cada niño. Hay momentos en los que los niños se centran en aprender algo nuevo a través de los libros. Y hay momentos en los que el niño no puede parar quieto, y entonces quiere una bici o quiere una pelota. Un chico de 16 años, por ejemplo, siempre va a pedir un móvil nuevo o una vídeoconsola.

-¿Se corresponde lo que los expertos sugieren y lo que realmente se hace?

-Los padres empiezan a tener conciencia de eso, máxime cuando ya han fracasado alguna vez y han regalado algo que ellos creían que era bueno para el niño pero éste lo ha rechazado. El padre debe aprender que lo que quiere él no es lo que quiere su hijo. Nunca hay que pensar por el niño, y no hay que saturarlo de juguetes, porque eso es muy perjudicial. Lo maleduca, porque después está esperando a que le den más en cantidad y no en función de lo que él quiere.

La Asociación Profesional de Pedagogos de Galicia (Apega) insiste en que lo más importante a la hora de regalar un juguete es tener en cuenta tanto la edad como la personalidad del niño. La organización recomienda los siguientes juguetes según la edad:

. De 0 a 6 meses. Los sonajeros, los muñecos de goma y los mordedores son los regalos estrella, porque ayudan al niño a descubrir su cuerpo, y a distinguir las formas y los colores.

. De 7 a 12 meses. El bebé empieza a explorar los objetos. Se aconseja regalar pelotas, muñecos de trapo, juguetes sonoros, balancines y andadores.

. De 13 a 18 meses. El niño aprende a andar. Los juegos más apropiados son los cubos, las bicicletas de tres ruedas o los cochecitos.

. De 19 a 24 meses. Se recomienda regalarle al pequeño coches, bicis, pinturas, instrumentos musicales o muñecos.

. De 2 a 3 años. Los triciclos, las palas, los cubos o los rompecabezas acaparan el protagonismo.

. De 3 a 5 años. Se aconsejan regalos como los muñecos articulados o los cuentos.

. De 6 a 8 años. El niño necesita acción. Una buena sugerencia son los teledirigidos o los monopatines.

. De 9 a 11 años. El protagonismo es para los juegos deportivos, electrónicos, de estrategia y de reflexión.

. Más de 12 años. El joven define su propia identidad. La apuesta es por los libros, la música y los videojuegos.