Hacerse con un puesto entre las 500 mejores universidades del mundo es complicado. Trepar hasta el top 100 de las instituciones de Educación Superior en el ámbito internacional es, en la actualidad, una especie de utopía para el Sistema Universitario de Galicia (SUG), con sus tres entidades independientes y sus siete campus.

Un grupo de expertos de la Comisión Europea, conocido como el think tank Bruegel, elabora cada año un ranking de las mejores universidades del mundo, entre más de 17.000 instituciones de todos los países. En primer lugar elige a la cúpula del saber, representada en el top 100 mundial, para continuar por tramos de 100 hasta las 600 más destacadas.

A partir de ahí, para de contar, porque la nota de corte en los indicadores de calidad está muy alta. En el último listado emitido por el equipo de expertos Bruegel, ninguna de las tres instituciones gallegas figura entre las 500 mejores del mundo. La única que se aproxima al grupo de las elegidas, un dato que la Comisión Europea maneja y tiene como referencia para la elaboración de estudios y diseño de estrategias en Educación Superior, es la Universidade de Santiago de Compostela, que ocupa el puesto número 560.

La de A Coruña y la de Vigo han quedado excluidas, hasta el momento, de la estadística Bruegel. Pero, ¿en qué se basa el think tank para incluir y ordenar por nivel a las instituciones de Educación Superior? El ranking mide la calidad de las entidades y, para ello, tiene en cuenta el tamaño, ratio profesor-alumno, modelo de gestión, presupuesto y gasto, producción científica, capacidad investigadora o número de alumnos destacados que se gradúa en sus aulas, como premios Nobel, pensadores, escritores o empresarios.

Según los expertos de Bruegel, las universidades europeas puntúan "mucho menos" que las norteamericanas en todos los rankings internacionales, como el Shanghai Jiao Tong University Academic Ranking of World Universities o el Times Higher Education Supplement Ranking. "Sólo cuatro estados de EEUU (Massachusets, California, Nueva York o Pensylvania) obtienen mejores resultados que cualquier país europeo: las universidades de los países del sur y este de Europa (entre ellos España) están a la cola de las del mundo desarrollado, mientras que Dinamarca, Finlandia, Bélgica y Holanda aparecen entre el puesto 200 y 500", explican fuentes del equipo Bruegel, quienes aseguran que una de las principales claves de la calidad está en el incremento de la inversión en educación superior. Según las conclusiones del think tank, Europa "invierte poco" en universidad e investigación, de hecho, "el gasto público y privado en Educación Superior se sitúa en el 1,5% del PIB frente al 3,3% de EEUU".

Si se calcula el gasto por alumno, las diferencias son más palpables: Europa invierte de media en cada estudiante 8.700 euros frente a los 36.500 euros por alumno que gasta Estados Unidos. Concretamente, en Galicia, esta cifra es levemente inferior: aproximadamente 6.500 euros. El modelo de gestión de las universidades americanas es diferente al europeo, con una mayor inyección de capital privado. En el último informe Bruegel, los primeros puestos están copados por Harvard, Cambridge, Yale, la University College London, Oxford, Chicago, Princeton, Massachusetts Institute of Technology, California Institute of Technology, Columbia y Pennsylvania.

Tras la cúpula, aparece alguna institución española a partir de las 200 mejores. Se trata de la Universidad Autónoma de Barcelona, con la etiqueta 211, la Autónoma de Madrid, en el 215, la Complutense de Madrid (252), la Pompeu Fabra (324) o la de Navarra (381). Granada, Valencia, Sevilla y Zaragoza están entre el número 400 y 600, al igual que la Universidade de Santiago.