Falta un mes y medio para que expire el actual plan de investigación e innovación de Galicia, del que dependen las becas y los contratos de más de 3.000 investigadores que trabajan en la comunidad, y todavía no hay uno nuevo sobre la mesa. Las universidades transmitieron ayer a la Administración autonómica su "preocupación" por la tardanza en la presentación del nuevo proyecto que, según las instituciones académicas gallegas, llega "con retraso".

El plan que sustituirá al Incite y que se aplicará durante los próximos años se está gestando en los despachos de la Xunta. Pese a que la Consellería de Economía, a través de la Dirección General de I+D+i, insiste en que estará aprobado antes de final de año, tanto las universidades como el colectivo de investigadores exigen un adelanto de las categorías y la gestión que incluirá el nuevo documento. "A estas alturas ya debería conocerse para contrastarlo. Estamos esperando un borrador", reivindican desde el colectivo de jóvenes investigadores de Galicia. Como novedad, la gestión de las becas y contratos de los científicos gallegos, hasta ahora en manos de la Consellería de Economía e Industria a través del Incite, dependerá a partir de enero de la Consellería de Educación e Ordenación Universitaria. El departamento que dirige Javier Guerra se centrará en la parte de la innovación empresarial y, la carrera de los científicos, la mayoría vinculados a los departamentos de investigación de las tres universidades gallegas, la controlará la Consellería que dirige Jesús Vázquez; un traspaso de competencias que también ha recibido alguna que otra crítica desde el ámbito universitario.

"Todavía no tenemos constancia real del traspaso de becas y contratos de investigadores desde la Consellería de Economía a la de Educación. Desde el punto de vista de la gobernanza, y también técnico, no es bueno repartir o compartimentar todo lo que tenga que ver con el I+D. Es menos operativo", reivindicó ayer en rueda de prensa el rector de la Universidade de Vigo, Salustiano Mato. Fue él quien puso en marcha durante el bipartito el plan Incite, "un modelo a seguir" en España.

Los vicerrectores de investigación de las universidades gallegas mantuvieron ayer un encuentro con miembros del Ejecutivo autonómico para abordar el estado de elaboración de lo que será el próximo plan de I+D+i. En la cita, mostraron su preocupación ante la falta de definición del proyecto. "Estamos esperando una respuesta, se nos dijo que se estaba trabajando", expresó Mato.

El rector vigués insistió en que el anterior programa de Recursos Humanos de los investigadores gallegos era un referente "que no se puede perder". Con él se consiguió agrupar todos los ámbitos de I+D que existían en los gobiernos anteriores en un solo campo.

El Plan Incite estableció, por primera vez en la comunidad gallega, tres fases en la carrera de investigación con sus correspondientes becas contratos por cada etapa. Desde las María Barbeito, becas predoctorales con dos años de duración por 20.440 anuales en la etapa de formación, hasta las Ángeles Alvariño, de tres años, en la etapa de especialización y con una retribución de 28.000 euros anuales. En la fase final, de consolidación: las Manuel Colmeiro, por tres años y más de 40.000 euros anuales de salario.

Desde Precarios Galicia explican que, aunque el plan se apruebe en diciembre, habrá retrasos del al menos tres meses para definir las convocatorias y materializarlas, es decir, "para que cada uno pueda estar en su lugar para trabajar". "La Xunta nos transmitió hace 15 días que estaban elaborando el nuevo plan y que nos pasarían el borrador. Todavía no lo tenemos. Nos preocupa porque han tenido año y medio para avanzar algo más y concretar; así se evitarían los retrasos que se van a producir. Creo que están hablando con las universidades para definir sus necesidades", comenta Beatriz Blanco, portavoz de Precarios.